Por Léa Mabilon
Publicado
hace 3 horas,
actualizado a las 17:39
El rey Carlos III ha eliminado la asignación anual de 1,2 millones de euros del príncipe Andrés, lo que le ha llevado a considerar la posibilidad de abandonar su residencia Royal Lodge.
El rey Carlos III tomó la trascendental decisión. En el libro del biógrafo Robert Hardman, Carlos III: Nuevo rey. Nuevo Tribunal. La historia internaa lo que el Correo diario tuvo acceso, este último afirma que el monarca habría cortado los fondos de su hermano, el príncipe Andrés, eliminando su asignación anual estimada en 1,2 millones de euros. Según sus informaciones, esta subvención permitió al pequeño favorito de la reina Isabel II cubrir los gastos de su estilo de vida y de su residencia en el Royal Lodge de Windsor.
Desde que fue apartado de sus funciones oficiales en 2019 debido a controversias relacionadas con su relación con Jeffrey Epstein y las acusaciones de agresión sexual contra Virginia Roberts Giuffre, el príncipe Andrés ha dependido de esta asignación para mantener su estatus. Ahora que se cortaron los cables, podría verse obligado a abandonar su casa, debido a los importantes costos de mantenimiento y seguridad asociados a ella. Además, una fuente declaró al tabloide que el soberano también habría pedido al director financiero de la Corona que detuviera estos últimos costes, que representan una cantidad colosal. “El duque ya no es una carga financiera para el rey”, dijo a los medios.
¿Una lección de vida?
Con esta limitación, Carlos III alentaría a su hermano a reducir sus gastos, y este último incluso consideraría mudarse a Frogmore Cottage, una residencia más modesta que anteriormente ocuparon el príncipe Harry y Meghan Markle. Esta decisión, en consonancia con el deseo de Carlos de modernizar la monarquía, marca una nueva etapa en la redefinición de los privilegios y prestaciones concedidos a los miembros de la familia real que ya no asumen funciones públicas.