El Tribunal de Cuentas (CdC) llevó a cabo un examen sumario de la situación de los colaboradores personales del Consejo de Administración de la ciudad de Ginebra en relación con el uso de recursos públicos para fines privados. Según ella, su participación en el trabajo electoral, además del trabajo institucional, carece de base legal. La Ciudad se sorprende de no haber sido escuchada en el contexto de este objeto.
En su carta dirigida a la alcaldesa de la ciudad de Ginebra, Cristina Kitsos, y hecha pública el jueves, el Tribunal escribe que pudo constatar que el Consejo de administración admite claramente que los auxiliares, los miembros del personal de la ciudad, pueden participar en asuntos privados y políticos. actividades . Y por no hablar de la preparación de congresos de partidos, campañas electorales o la gestión de las redes sociales personales de los magistrados.
Esta situación no tiene fundamento jurídico, porque la condición de colaborador personal no se distingue de la de otros auxiliares. Está sujeto al mismo deber de cargo, señala el CdC. Se especifica que los funcionarios deberán asumir personalmente la responsabilidad de su trabajo y abstenerse de realizar cualquier ocupación ajena al servicio durante el horario laboral.
Asimismo, esta situación es contraria a buenas prácticas como las formuladas por la Comisión de Venecia. El uso abusivo de los recursos públicos constituye un obstáculo estructural para el buen desarrollo de las operaciones electorales, recuerda el Tribunal. Es probable que afecte los procesos electorales y el libre albedrío de los votantes al conferir una ventaja a los miembros del ejecutivo municipal que son candidatos a la reelección.
Tres recomendaciones
El Tribunal recomienda al Consejo de Administración adaptar el marco de actuación de los colaboradores personales de conformidad con la situación del personal y las buenas prácticas antes mencionadas. Tal aclaración podría hacerse mediante una directiva del Consejo de Administración, sugiere.
La institución también sugiere al Ayuntamiento tomar nota de la consulta del 3 de diciembre, realizada por la Corte en relación con la comunicación del Estado. Y más particularmente la relativa a los riesgos y vías de reflexión relativas al uso de recursos públicos para fines privados. Luego, finalmente, adapte en consecuencia las especificaciones de los colaboradores personales.
Este examen sumario se produjo tras una comunicación ciudadana, aclaró además el CdC.
“Sorprendente y cuestionable”
El Consejo de Administración toma nota con interés de las recomendaciones del Tribunal de Cuentas. Solicitará una reunión al inicio del año escolar para discutir este tema, favoreciendo un intercambio constructivo más que un efecto de anuncio, escribió en un comunicado.
De hecho, el Ejecutivo subraya que nunca ha sido oído por el Tribunal de Cuentas. Para emitir su carta, se contentó con una única reunión -en junio de 2024- con el secretario general de la ciudad de Ginebra, “lo que es cuanto menos sorprendente y cuestionable”, subraya.
El examen sumario del Tribunal contiene, por tanto, afirmaciones aproximadas que pueden inducir a error y que podrían haberse evitado, lamenta el Ayuntamiento.
Transparente
El Consejo recuerda que siempre ha actuado de forma totalmente transparente. En particular, a principios de 2024, amplió su reflexión sobre la separación entre trabajo institucional y trabajo político para garantizar la coherencia de las prácticas dentro de los departamentos.
Finalmente, el Consejo de Administración se muestra sorprendido por el calendario elegido para esta comunicación, cuando la única reunión con el Ayuntamiento data de junio de este año. Según él, este anuncio da “la impresión de querer desacreditar a la clase política a tres meses de las elecciones municipales, mientras que ningún elemento concreto apoya ‘usos potenciales’ de los recursos públicos para fines privados”.
Este artículo fue publicado automáticamente. Fuente: ats