Acusado de intento de extorsión por parte de una banda organizada y de asociación criminal en un caso investigado en Rouen, el influencer, cuyo verdadero nombre es Kenza Benchrif, se encuentra bajo supervisión judicial.
Publicado el 27/11/2024 16:45
Actualizado el 27/11/2024 17:41
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Ella admite parte de los hechos. La influencer Kenza Benchrif, alias Poupette Kenza, admitió haber encargado a un secuaz en el caso de extorsión por el que fue encarcelada, declaró a la AFP su abogado Jérémy Kalfon, el miércoles 27 de noviembre, confirmando informaciones de parisinoque dedica un artículo a su “remordimientos”. La joven, de 24 años, está embarazada de su tercer hijo.
Acusado a principios de julio de intento de extorsión por parte de una banda organizada y de conspiración criminal en un caso investigado en Rouen, el influencer fue puesto en prisión preventiva antes de ser puesto en libertad el 31 de octubre y puesto bajo supervisión judicial. La Justicia abrió una investigación el 23 de febrero, tras la denuncia interpuesta por dos personas por intento de extorsión. esta pareja “fue amenazado físicamente por un particular a condición de entregarle una cantidad de 200.000 euros”confirmó la fiscalía de Rouen en julio. este hombre “explicó haber contactado a las víctimas para resolver una disputa financiera entre ellas y un ‘influencer’.”
“Madame Benchrif reconoce haber aceptado la oferta de servicio de este hombre, después de haber recurrido sin éxito a amigos y abogados comunes”. declaró Jérémy Kalfon. “Si ella sabía que este hombre iba a impresionar a su ex agente y a su marido con su constitución y el efecto sorpresa, nunca validó las amenazas directas o indirectas de violencia física”continuó. “Ella dijo: ‘Efectivamente, acepté, me ofrecieron encargarle a este tipo que fuera a resolver mi problema, acepté, obviamente sabía que sería un poco de presión (…) Pero ese no es el caso’. No es para nada lo que pedí'”, añadió Jérémy Kalfon.
“Si criticamos mucho a los influencers, no debemos olvidar que, al igual que los futbolistas, son objeto de mucho deseo. Mucha gente gravita a su alrededor y afirma tener soluciones a todos sus problemas para ganarse su simpatía. la esperanza de obtener dinero”argumentó el abogado. La pareja de la influencer, Allan Liehrmann, afincada en Dubái, regresó a Francia el 23 de septiembre “explicarse ante la justicia”. Detenido en el aeropuerto, fue a su vez acusado de los mismos hechos y encarcelado.