Últimamente hemos observado un creciente entusiasmo entre los franceses por Corea del Sur, un país situado al otro lado del mundo, rico en una cultura única. De hecho, la cultura coreana está profundamente arraigada en la vida cotidiana de los jóvenes franceses. Su música, su gastronomía y su forma de vida están ganando popularidad en Francia y siguen atrayendo cada vez más adeptos.
La cultura surcoreana seduce a los franceses desde hace varios años
La atracción de los franceses por la cultura coreana sigue creciendo. Entre las tendencias actuales, el K-beauty está causando sensación. Muchas personas influyentes están probando productos de belleza surcoreanos y animando a su comunidad a descubrir este enfoque innovador de cuidado. Pero Corea del Sur también atrae a los entusiastas de la moda, en gran parte gracias a la Semana de la Moda de Seúlun evento emblemático para los amantes de las tendencias. Las creaciones coreanas, conocidas por su estilo casual y chic, están disfrutando de un éxito creciente.
Para otros, Corea del Sur es el destino elegido para conocer al famoso grupo musical BTS, que ha cosechado un éxito mundial. Con sus letras cautivadoras y su impresionante coreografía, esta boy band ha capturado los corazones de los jóvenes franceses, animándolos a descubrir más artistas coreanos y a considerar una viaje a seul para asistir a sus conciertos.
Muchos jóvenes también están desarrollando una pasión por el idioma coreano, a pesar de ser sólo el decimoséptimo idioma más hablado del mundo. Sin embargo, dominar el coreano puede ser una ventaja en un CV e impresionar a los reclutadores.
Actividades imprescindibles en Corea del Sur en otoño
La mejor época para ir a Corea del Sur es de septiembre a noviembre. Durante esta temporada, el número de turistas disminuye y el clima se vuelve agradable, ideal para visitar los numerosos sitios históricos y culturales del país. Entre las actividades que no debe perderse, una visita al Tercer túnel de la DMZ permite admirar un impresionante panorama natural. El famoso Palacio Gyeongbokgung también es de visita obligada: allí podrás vestir hanbok, ropa tradicional coreana, para sumergirte en la historia de la región.
En Seúl, la capital, los amantes de la arquitectura quedarán encantados con los impresionantes edificios. Para disfrutar de una vista impresionante de la ciudad, el ascenso del recorrer Sky Lotte Worldque culmina a 500 metros de altura, es una experiencia única.
Por último, Corea del Sur es especialmente apreciada por los franceses por su comida callejera, omnipresente en las calles de Seúl, especialmente en los pojangmacha (carritos cubiertos). Entre las especialidades locales que se pueden probar: el tteokbokki, pasteles de arroz con salsa picante, los mandus, una especie de ravioles rellenos de carne o verduras, y el bungeoppang, un gofre relleno de frijoles rojos, que seduce a los turistas por su apariencia estética.