El pago se realiza en un mostrador lleno de barriles de cerveza. En una concurrida sala de recepción, Los sillones están convenientemente dispuestos para recostarse frente a un partido transmitido en la pantalla grande. Al fondo podemos ver una decena de campos de fútbol sala cubiertos. Dos equipos de cinco jugadores, compuestos libremente por los clientes, compiten en estos campos en miniatura rodeados por todos lados por redes, generalmente reservables hasta medianoche.
En esta sala del norte de París, el espectáculo no es imprescindible. Se trata sobre todo de “divertirse”, sugiere la empresa en su sitio web. Al finalizar su partido, se ofrece al cliente la posibilidad de visualizar repeticiones goles, todos listos para ser retransmitidos en las redes sociales, como un hat-trick del diputado de La France insoumise de Bouches-du-Rhône Manuel Bompard, retransmitido en la red social empresarial.
como el gimnasios de escalada o pádel (deporte de raqueta relacionado con el tenis, que generalmente se juega a dobles, en una pequeña pista cerrada) que han surgido en los últimos años en ciudades grandes y medianas (más de 2.000 comercios de espacios de ocio deportivo, sin contar fitness, Según la patronal Union Sport et Cycle), estos nuevos lugares de práctica representan un sector en auge. “Todos los pabellones de escalada o fútbol sala que se abren son rentables”asegura Virgile Caillet, delegado general de la Unión Deporte y Ciclismo.
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