Una vez más, la presencia de Franck Ferrand en los comentarios del Tour de Francia cae mal a los ojos de muchos espectadores.
El Tour de Francia tuvo un gran comienzo en Italia. Especialmente para el ciclismo francés, ya que las dos primeras etapas las ganaron dos corredores franceses: Romain Bardet y luego Kevin Vauquelin. Inaudito desde 1968. Y el domingo el mano a mano entre Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard en la subida a San Luca augura un nuevo duelo épico entre ambos a lo largo de las tres semanas del Tour.
Por lo tanto, France Télévisions, principal emisora del Tour de Francia, tiene motivos para alegrarse. Sin embargo, la audiencia de la primera etapa fue algo decepcionante para el servicio público, ya que, aunque France 2 fue líder, el sábado por la tarde la primera etapa sólo reunió a 2,89 millones de espectadores para una cuota de mercado del 32,8%. Se trata de nada menos que 200.000 espectadores perdidos respecto al año pasado, cuando la primera etapa en el País Vasco fue vista por 3,09 millones de aficionados al ciclismo.
Franck Ferrand apuntado
Otra decepción para France TV son las duras reacciones provocadas por la presencia de Franck Ferrand en los comentarios junto a Alexandre Pasteur, Marion Rousse y Laurent Jalabert. Si los dos ex corredores gozan de un buen índice de popularidad, la situación es muy diferente para el historiador, blanco de numerosas críticas. Así lo demuestran los numerosos comentarios en las redes sociales a lo largo del fin de semana.
Tanto como sus comentarios, sus colaboraciones con Valeurs Acteurs o CNews, su visión reaccionaria de la historia y su defensa de ciertas teorías conspirativas caen mal a los ojos de muchos aficionados al ciclismo.
