Según la prensa argelina, pesan contra el empresario de 59 años varios cargos, acusado junto con otras personas de actos de corrupción mediante la “celebración de contratos en violación de la ley para la concesión de “ventajas indebidas a otros y la obtención de privilegios injustificados”. “, “despilfarro intencionado de fondos públicos” y “abuso de poder”.
Kheireddine Zetchi, que sucedió a Mohamed Raouraoua al frente de la FAF, presidió los destinos del fútbol argelino entre 2017 y 2021. También estuvo detrás de la creación del centro de formación de fútbol Paradou.
La corrupción es un lugar común en el fútbol argelino, ya que la gestión del fútbol bajo sus predecesores estuvo marcada por la evasión y la corrupción.
En realidad, el proceso judicial contra Kheireddine Zetchi es una venganza contra el régimen militar de Argelia, que no perdonó al ex presidente de la FAF su voto durante la 43ª Asamblea General de la Confederación Africana de Fútbol (CAF), a favor de la modificación del artículo 4 de los estatutos del organismo panafricano.
Dicho artículo, votado por unanimidad en marzo de 2021 en Rabat, estipula que ningún Estado no miembro de la ONU puede formar parte de un organismo internacional de carácter cultural, deportivo o de otro tipo y sólo los representantes de los estados independientes y miembros de la ONU son admitidos en la CAF.
Una enmienda que puso fin definitivamente al sueño de los cabos de Argel cuyo objetivo era la admisión de la pseudo-RASD en la CAF.
Par Le360 deporte
27/11/2024 a las 22:26