La velada fue perfecta para Kevin Pasche y el Lausanne HC el jueves contra el Zurich. Muy exigente, el portero vaudois quiso reaccionar tras actuaciones que no le habían satisfecho.
Su grito de rabia habría resonado sin duda en la pista de hielo de Malley si los aficionados de Lausana no hubieran celebrado como es debido la victoria de sus Leones (2-0) en el momento en que sonó la sirena final. Kevin Pasche se mantuvo firme ante su portería en los últimos minutos, muy disputados, contra el equipo de Zúrich, jugando 6 contra 4.
“En Berna, antes del parón internacional (derrota por 7-2) y el martes contra Ginebra (derrota por 5-0), no me encontré a la altura. Tenía muchas ganas de reaccionar esta noche y el equipo finalmente me ayudó mucho. Me encontré a la altura y eso me hace sentir bien”, afirmó el joven portero de 21 años, que vive su primera temporada como portero número 1 de la Liga Nacional, en la zona mixta.
Coincidencia de referencia
“Es el partido de referencia que necesitábamos para empezar de nuevo después del descanso. Además, contra el Zúrich fue perfecto. Ahora se trata de mostrar más regularidad”, continuó Kevin Pasche.
El portero del LHC no dejó de elogiar el trabajo de su defensa durante un intenso final de partido que sin duda recordó a algunos espectadores la última final del play-off, perdida en siete partidos contra el mismo Zurich. “+Glausi+ (editor: Andrea Glauser) me salvó dos goles esta noche, salvé otros para algunos. Tuvimos buena química, pero sabemos que no la tendremos todas las noches. Tenemos que trabajar en eso”, explicó el portero del Lausana, que mantiene en la mira el objetivo marcado por su entrenador Geoff Ward.
“Un hermoso espectáculo”
“El período hasta diciembre va a ser intenso e importante. Tenemos muchas ganas de permanecer entre los cinco primeros, incluso entre los tres primeros”, anunció. Con sólo un punto de ventaja sobre el Zurich (que ha jugado dos partidos menos) y dos sobre Davos, Kevin Pasche es consciente de que esta primera plaza no tiene el mayor valor.
“Este liderazgo es gratificante, pero sabemos que una derrota el viernes en Zug podría hacernos perder dos o tres puestos”, recordó. “Este año está muy igualado y es fantástico para los aficionados. También supone mucha más presión para nosotros, pero produce un gran espectáculo”. Es difícil contradecirlo.
Este artículo fue publicado automáticamente. Fuente: ats