TORONTO | En el vestuario canadiense el sentimiento es unánime: la situación es embarazosa y hay que encontrar la manera de salir de esta mala racha.
“Se está poniendo pesado. Es extremadamente frustrante, afirmó David Savard. No podemos salir del letargo, nos cuesta generar ocasiones de gol. Es frustrante”.
“El estado de ánimo no es muy bueno en este momento. Todavía tratamos de mantener una actitud positiva, dijo Josh Anderson, visiblemente irritado. Intentamos encontrar nuestro entusiasmo y hacer las cosas correctas. Una vez que ganemos uno, estaremos bien”.
Está muy bien decirlo, pero para lograrlo hay que esforzarse.
Y actualmente, salvo algunas raras excepciones (Brendan Gallagher, Josh Anderson, David Savard, Emil Heineman, Jake Evans, Lane Hutson y Lucas Condotta), nadie parece dispuesto a pagar el precio.
Martin St-Louis, que intentaba ver lo positivo en esta reunión, admitió a medias que el nivel de esfuerzo quizás no fue el mismo por parte de todos.
“En general, sí. ¿Son todos? No necesariamente”, dijo.
“A veces, cuando te falta confianza, puede resultar pesado para el jugador. Quizás eso se refleje en su ética de trabajo. Pero, en general, no es una cuestión de ética laboral”, continuó.
Una respuesta general nebulosa.
El ejemplo de Gallagher
Lo que sí es seguro es que si el canadiense quiere marcar más goles tendrá que ensuciarse las narices. Haz como Brendan Gallagher y acepta que te golpeen con palos en las pantorrillas y te revisen dos veces la espalda.
“Tenemos que seguir su ejemplo”, coincidió Savard. Va a los lugares que le duelen y logra encontrar la red.
“Necesitamos que todos contribuyan en la ofensiva. De lo contrario, no ganaremos, insistió Nick Suzuki, en blanco por cuarto partido consecutivo. Me incluyo en eso. Espero más de mí y estoy seguro de que los demás también lo esperan”.
Al menos los dirigentes del equipo parecen ser conscientes del problema. Ahora queda tomar las medidas necesarias para solucionarlo.
Tras el partido, el canadiense permaneció en Toronto, donde entrenará el domingo antes de partir hacia Buffalo. Se enfrentará a los Sabres el lunes a las 12:30 p.m.