Ganador del Gran Premio de Brasil de Fórmula 1 el domingo, por delante de los franceses del Alpine Renault Esteban Ocon y Pierre Gasly, Max Verstappen (Red Bull Racing) puso fin a una rara sequía. El tres veces campeón del mundo no había inscrito su nombre en la lista desde el 23 de junio, cuando triunfó en el GP de España en Barcelona.
En las diez carreras siguientes, había presenciado, a veces atónito y a veces irritado, las victorias de George Russell, Lewis Hamilton (dos veces), Lando Norris (dos veces), Charles Leclerc (dos veces), Oscar Piastri (dos veces) y Carlos Sainz.
Después de su éxito en Interlagos, apareció con una nueva sonrisa en la rueda de prensa. Una vez instalado en la plataforma, miró alrededor del público y se sorprendió al no ver muchos periodistas británicos allí. Así que, antes de responder a las peticiones de los editores, se dirigió a ellos en broma: “Tengo una pregunta rápida: no veo a los medios británicos en la sala”, señaló. ¿Ya partieron hacia el aeropuerto o no sabían dónde se realizaría la rueda de prensa?
En las últimas semanas, mientras el holandés parecía perder impulso y el resultado del campeonato mundial se volvía incierto, los medios británicos creían en las posibilidades de éxito de su compatriota Lando Norris (McLaren).
La broma generó algunas risas en la sala e hizo sonreír a Ocon y Gasly, que rodeaban a Verstappen, al momento de las entrevistas.
Con 62 puntos de ventaja sobre Norris, a tres carreras del final de la temporada, el título parece ahora prometido para Verstappen.