Los rumores sobre el despido de Jim Montgomery, entrenador en jefe de los Boston Bruins, están cobrando fuerza.
Imagínese el retorcido destino… si miramos la tensa situación en Montreal mientras hablamos.
Montgomery, nativo de Montreal y entrenador que ganó el Jack Adams, se encuentra bajo presión después de una serie de malas actuaciones de los Bruins.
Los medios de Boston informan que Montgomery está bajo constante vigilancia por parte de la gerencia de los Bruins.
La organización también ha sido criticada por su falta de apoyo a Montgomery durante un momento difícil. Esta gestión podría precipitar su salida, sobre todo si el club sigue cayendo.
Mientras tanto, en Quebec, también crece la impaciencia contra Martin St-Louis, que lucha por dar la vuelta a los Montreal Canadiens.
Algunos aficionados ya imaginan un escenario en el que Montgomery sustituiría al St-Louis, un sueño reforzado por los vínculos personales entre Montgomery y Kent Hughes, director general del CH.
Después de una vergonzosa derrota por 5-2 ante los Dallas Stars, Montgomery criticó abiertamente la actitud de sus jugadores, denunciando la falta de esfuerzo y concentración en su papel.
Esta declaración refleja una creciente frustración en Boston.
Según el destacado periodista de la NHL, Darren Dreger, ya se están llevando a cabo acaloradas conversaciones entre la gerencia de los Bruins y los propietarios, lo que sugiere que los cambios podrían ocurrir rápidamente si los resultados no mejoran.
Es posible que Montgomery no sobreviva a la creciente presión, especialmente si los Bruins no corrigen rápidamente su trayectoria al comienzo de la temporada.
Cada vez está más claro que las especulaciones sobre su futuro no son infundadas. Bien podrían despedirlo.
La idea de que Montgomery regrese a Montreal es intrigante. Montgomery, que habla francés con fluidez y tiene una sólida trayectoria de vida, sería una opción atractiva para los canadienses.
Sus vínculos pasados con Kent Hughes añaden otra capa de misterio a este posible escenario.
El viaje de CH GM y Jim Montgomery está anclado en una relación de larga data, que se remonta a su juventud.
Ambos jugaron juntos en el circuito amateur de Quebec. Más precisamente, fueron compañeros en el Cégep de Saint-Laurent durante la temporada 1987-1988, en la ya desaparecida Liga Colegiada AAA de Quebec.
Bajo las órdenes del entrenador Gérard Gagnon, ganaron un campeonato. Hughes, que tenía una excelente visión del juego y destacaba en la distribución del disco, y Montgomery, un delantero inteligente y perseverante, ya compartían un vínculo en el hielo.
Además de sus años como compañeros de equipo, Hughes y Montgomery formaron un vínculo que duró más allá de su tiempo en el hockey juvenil.
La relación entre los dos hombres se mantuvo activa, incluso después de que Hughes iniciara una carrera como agente de jugadores y Montgomery pasara a entrenar en la NCAA y más tarde en la NHL.
Sin duda, esta conexión personal podría desempeñar un papel estratégico en el futuro de los Montreal Canadiens.
Montgomery ha sido mencionado varias veces como un candidato potencial para tomar las riendas del CH, particularmente cuando el club dudaba en confirmar a Martin St-Louis como entrenador en jefe en el verano de 2022.
En ese momento, Montgomery también buscaba estabilidad, ya que recientemente había abandonado Dallas por motivos personales.
El entrenador, tras ser despedido por los Dallas Stars en 2019 por problemas relacionados con el alcohol, se sometió a un tratamiento que le ayudó a encontrar el camino de vuelta a la sobriedad.
Después de una exitosa etapa como asistente con los St. Louis Blues, se convirtió en entrenador en jefe de los Boston Bruins en 2022.
Su resistencia y capacidad para recuperarse impresionaron a muchos en el mundo del hockey, incluido Hughes, quien podría haberlo visto como una figura ideal para liderar un equipo en reconstrucción en Montreal.
La historia entre Montgomery y Hughes no se limita a su pasado compartido. Montgomery también entrenó al actual defensa de los Canadiens, Mike Matheson, cuando dirigió a los Dubuque Fighting Saints en la USHL en 2011-2012.
Durante el programa matutino de BPM Sports, Renaud Lavoie incluso dijo:
“Un día entrenará al canadiense” en referencia a Montgomery.
Incluso si St-Louis sigue en el cargo, la idea es ya un sueño para sus partidarios y podría cobrar impulso si persisten los reveses de CH.
Mientras los Bruins atraviesan un momento difícil, Martin St-Louis también está en crisis en Montreal.
El plan de reconstrucción del CH se ha topado con un muro, alimentando el descontento de aficionados y analistas.
El lenguaje corporal de los jugadores en el hielo y los repetidos errores defensivos destruyeron la confianza en el vestuario.
El propio St-Louis criticó abiertamente recientemente a los aficionados y a la prensa, lo que amplificó la tensión a su alrededor.
El malestar en torno a Martin St-Louis no se limita a los resultados sobre el hielo. El técnico es criticado por su obstinación con determinados sistemas, en particular con su defensa hombre a hombre, percibida como catastrófica y sobre todo inadecuada para el perfil de sus jóvenes defensores.
Según se informa, este enfoque controvertido causó frustraciones en el vestuario y entre algunos veteranos, alimentando el descontento entre los fanáticos.
St. Louis, que inicialmente parecía traer una nueva cultura, ahora enfrenta una pérdida generalizada de confianza.
Esta impaciencia bien podría forzar la decisión de Hughes, quien tendría la oportunidad perfecta de reclutar a su amigo Montgomery si los Bruins lo liberan.
Si Jim Montgomery está disponible, ofrecería a los Canadiens una rara combinación de experiencia, liderazgo y conocimiento del mercado de Montreal.
Al fin y al cabo, estamos hablando de un entrenador reconocido por su rigor y su capacidad para sacar lo mejor de sus jugadores, cualidades que podrían resultar atractivas para una organización que busca estructura.
Sin embargo, la pregunta sigue siendo: ¿Podría Montgomery realmente tener éxito donde St. Louis está luchando actualmente?
Su llegada no garantizaría el éxito, pero podría inyectar una nueva dinámica a un equipo que parece estar perdiendo fuerza a las órdenes del “entrenador del pipí”.
Los destinos cruzados de Montgomery y St-Louis ya están cautivando la imaginación colectiva. Si los Bruins deciden separarse de Montgomery y la situación en Montreal no mejora, Kent Hughes podría verse tentado a traer de vuelta a su ex compañero para liderar el CH.
En Boston, algunos observadores han notado que Montgomery parece tener problemas con la presión después de perder todo el apoyo de sus jugadores.
El escenario de una separación con los Bruins sería simbólico: Montgomery podría regresar como un héroe a su ciudad natal, tomando las riendas de un equipo totalmente perdido en el hielo, en busca de dirección y sin autoridad, mientras que Martin St-Louis continúa estancado en la suavidad.
Con tanta presión en ambos mercados, tanto en Boston como en Montreal, una cosa es segura: los próximos días serán decisivos para el futuro de estos dos entrenadores.
El vínculo entre Hughes y Montgomery es más que un detalle: es una conexión profunda, basada en la amistad, la experiencia común y los valores compartidos.
Esta relación bien podría influir en la próxima gran decisión de los Canadiens, si el equipo decide dar un nuevo giro detrás del banquillo.
Advertencia: si el CH sigue perdiendo, pierde y vuelve a perder. Hughes no tendrá más remedio que llamar a su amigo del pasado.