Como el wah de Hyundai, nunca paro. Otro día, otra plataforma, otra serie de televisión, el gas está al fondo. Pero siempre con un peinado impecable como Marilou, que ya no baila en la luna, sino al volante de un Tucson en modo bebé.
Publicado a las 2:13 a.m.
Actualizado a las 7:15 a.m.
Así que aquí estoy en illico+, la nueva plataforma puesta en línea esta semana por Videotron, que fusiona los catálogos de televisión de Club illico y Vrai. Truco mnemotécnico simple: Club illico + True = illico+.
Este es uno de los raros matrimonios forzados que deleita a todos los invitados. Porque suscribirse a Vrai, una plataforma casi confidencial especializada en docuseries, no valía 10 dólares al mes. Por el mismo precio, Club illico ofrecía producciones más cautivadoras como IXE-13 y empresa separada.
Ahora, a 15 dólares mensuales para los clientes que no son de Videotron y alrededor de diez dólares para los fans de Helix, illico+ se encuentra en la parte inferior del rango de precios de Netflix y compañía. Si ya estás suscrito al Club illico, no toques nada, la migración a illico+ se realizó automáticamente durante la noche del martes al miércoles y ningún representante vendrá a tu casa, como cita un anuncio retro de Norwich Union.
La primera pepita ofrecida por illico+ se llama la coleccionde los cuales vi los dos primeros episodios durante un total de ocho horas. Está muy bien hecha y es original, sí, pero le falta una fuerza dramática potente que nos enganche a este elenco de personajes taciturnos y tímidos.
Transmisión oscura y dura, la coleccion se centra en un clan de pequeños delincuentes en Montérégie, donde el trabajo de cobrador de deudas se transmite de generación en generación. Con varios puñetazos en la cara, comentarios denigrantes y varias fracturas en la parte superior del cuerpo.
Creado por el muy ágil Podz (19-2, Medianoche por la tarde), la coleccion comienza con el interrogatorio de Kevin Larose (excelente Charles-Aubey Houde, visto en las armas), que se prepara para jubilarse de su agotador trabajo como cobrador de deudas. Kevin y su novia Julie (Chanel Mings) están esperando su primer hijo y el espectador comprende que Kevin quiere romper el ciclo de violencia en el que gira desde su adolescencia.
Los personajes que giran en torno a este universo de bandidos son a la vez truculentos y aterradores.
Primero está Nicolas Proulx (Guy Nadon, nunca está mal), apodado Santa por su inmensa barba, un jefe sádico que valora a la “familia” extensa sin dudar en romper los brazos de sus “hijos” que desobedecen. Un buen padre, por cierto.
Lo más interesante es cuando la coleccion Se remonta a 2007 para mostrarnos cómo Kevin, entonces un adolescente, cayó en el crimen. Después de un tiroteo en un camping que casi los mata, la madre de Kevin, la bella Suzanne (muy buena Caroline Néron), gran admiradora de Bloody Caesars, confía a su hijo a su hermano mayor Stéphane (Claude Legault), que regenta una empresa nada elegante. club de golf, en Montérégie.
Kevin (Loic Oliviera), de 12 años, pasa allí su primer verano buceando con su primo Yannick (Mathieu Drouin), de 15 años, un delincuente que bebe, roba y fuma como un bombero. El tío Stéphane (Claude Legault), conocido como Birdie, también involucrado en la organización criminal de Santa, toma a Kevin bajo su protección y le enseña el mismo tipo de cosas ilegales que Tony Soprano le transmitió a su sobrino Christopher. Por ejemplo: cómo enterrar un cadáver cerca del hoyo número dos sin que la policía lo atrape… y un detector de metales.
A lo largo de los episodios, la coleccion navegar entre Breaking Bad, Los Soprano, Hechos diversos y Serie negraen particular por el personaje sobreexcitado de Danny conocido como Le Pit (Pierre-Paul Alain), que podría ser primo de Marc Arcand (Marc Beaupré).
Este inframundo, imaginado por Ludovic Huot (Caminar en la sombra) y Charles-Étienne Brassard, está lleno de relaciones retorcidas muy creíbles. Creemos que a Suzanne y a su hermano Stéphane les gustaría salir de la organización de narcotráfico dirigida por Santa. Pero nunca lo consiguen: todo les devuelve al crimen organizado y al dinero fácil que obtienen de él. El segundo episodio expone el alcance del talento de Charles-Aubey Houde, en el papel de un hombre infinitamente amable y paternal, pero brutalmente cruel con una madre que le debe miles de dólares.
Y como en cuidame, la coleccion nos sumerge en un mundo que no es ni rico ni pobre, donde la gente dice malas palabras con alegría, donde la gente fuma dentro y donde se comunican con bofetadas. La creación de Podz evoca la de 19-2 con su ingeniosa puesta en escena (atención a los retratos familiares) y una cruda representación de la violencia, nunca estetizada.
El problema con esto Recopilación ? Es difícil embarcarse en la búsqueda de los protagonistas. Como si faltara un tema muy fuerte, que nos obligaría a tragarnos la serie de una sentada. El primer episodio no hace justicia a la calidad de la obra. Espere hasta el final del segundo para decidir si Videotron cobrará o no su suscripción a illico+.
yo levito
Con Geneviève Schmidt en ESTADÍSTICA
Una vez más esta semana, la intérprete de la cirujana intensivista Isabelle Granger brilló en escenas muy concurridas de la telenovela médica de Radio-Canada. La vimos tambalearse en su cocina cuando gritaba desesperada, impotente ante el cáncer que la atacaba. La vimos mantener toda su dignidad en el hospital Saint-Vincent, mientras los efectos de la quimioterapia le impedían tratar a sus pacientes. Todo pasa por los ojos de esta gran actriz. Incluso cuando ella no dice nada, lo entendemos todo.
lo evito
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