Un terrible incendio en Los Ángeles redujo a cenizas la editorial Belmont Music, llevándose consigo tesoros musicales de valor incalculable: manuscritos y partituras originales del legendario compositor Arnold Schoenberg. Una pérdida irreparable para el patrimonio musical mundial…
Los terribles incendios que azotan Los Ángeles desde hace varios días se han cobrado una víctima más en el mundo cultural. Según fuentes cercanas al asunto, la editorial Belmont Music, especializada en la promoción de las obras del compositor Arnold Schoenberg, quedó completamente arrasada por las llamas. Un desastre que redujo a cenizas tesoros musicales de valor incalculable, incluidos manuscritos y partituras originales del maestro de la música contemporánea.
Archivos únicos se esfumaron
La noticia fue anunciada por el propio Larry Schoenberg, hijo del compositor y director de Belmont Music. En una emotiva declaración difundida en las redes sociales, confirmó que todo el stock de la editorial había sido destruido en el fuego, llevándose consigo piezas únicas del patrimonio musical:
Los manuscritos y las partituras originales de mi padre han desaparecido para siempre, consumidos por las llamas. Es una inmensa pérdida para la memoria de su obra.
Larry Schoenberg, hijo de Arnold Schoenberg y director de Belmont Music
Si afortunadamente la mayor parte de los archivos del compositor se conservan en Centro Arnold Schoenberg de Viena, su ciudad natal, los documentos destruidos todavía representaban una parte importante de su patrimonio artístico. De hecho, Belmont Music conservaba el material original utilizado por los músicos para interpretar las composiciones de Schoenberg, partituras anotadas por la mano del maestro.
Un duro golpe para la memoria del compositor
Nacido en 1874 en Viena, Arnold Schoenberg es considerado uno de los mayores revolucionarios musicales del siglo XX.. Pionero de la atonalidad y el dodecafonismo, influyó profundamente en generaciones de compositores. Fundador de la Segunda Escuela de Viena, tuvo que huir de Austria tras la llegada al poder de los nazis en 1933, quienes consideraban su música “degenerada”.
Exiliado en Estados Unidos, Schoenberg se instaló en Los Ángeles, donde enseñó en la Universidad de California. Allí murió en 1951, dejando tras de sí una obra inmensa y revolucionaria. Obras maestras que han cambiado para siempre el rostro de la música contemporánea, como Lunar Pierrot, La noche transfigurada o su ópera inacabada Moisés y Aarón.
Un llamamiento al mundo musical para preservar la obra
Ante esta tragedia, Larry Schoenberg quiere ser combativo. A pesar de la pérdida de estos archivos únicos, asegura que Belmont Music continuará con su misión de promocionar el trabajo de su padre. Una obra de memoria imprescindible para transmitir a las nuevas generaciones el patrimonio artístico del compositor:
Estamos decididos a seguir llevando la música innovadora de Schoenberg al mundo. Su trabajo debe seguir viviendo e inspirando a los músicos de hoy y de mañana.
Larry Schoenberg
Para ello, el director de Belmont Music llama a la movilización del mundo musical. Invita a orquestas, conjuntos e intérpretes a adoptar las composiciones de Schoenberg para presentarlas al mayor número posible de personas. Un llamamiento vibrante para que La llama del genio vienés sigue brillando, más allá de la tragedia de los incendios..
Por su parte, la editorial prevé virar más hacia lo digital para continuar con su labor de distribución. Aunque las partituras originales han desaparecido, lo esencial permanece: la música revolucionaria de Arnold Schoenberg, cuyos acentos visionarios siguen resonando.
Related News :