Mientras organizaba su conferencia anual, a Vladimir Putin le preguntaron sobre Bacahr al-Assad, exiliado en su país. El presidente ruso dice que aún no ha hablado con el ahora expresidente, pero no descarta una reunión.
“Aún no me he reunido con el presidente Assad desde su llegada a Moscú. Tengo la intención de hacerlo, definitivamente hablaré con él”, dijo el presidente ruso.
Vladimir Putin se negó a considerar su caída como un fracaso para Rusia.
“Quieren presentar todo lo que está sucediendo en Siria como una especie de fracaso, una derrota para Rusia. Te aseguro que no es así y te diré por qué. Después de todo, vinimos a Siria hace diez años para que no se creara allí un enclave terrorista, como vimos en otros países, por ejemplo en Afganistán. »
Pero ¿qué pasa con el futuro de Rusia en Siria? Moscú, que apoyó al régimen durante al menos nueve años, se muestra optimista. “Mantenemos relaciones con todos los grupos que controlan la situación sobre el terreno. Con todos los países de la región. La inmensa mayoría de ellos nos dice que estarían interesados en mantener nuestras bases militares en Siria. “, declaró Vladímir Putin.
Rusia afirma haber logrado el objetivo que se fijó en 2015 al intervenir en Siria: destruir a los grupos terroristas que pueblan el país.
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