En zona mixta, tras la victoria del Paris Saint-Germain (3-1) ante el Olympique Lyonnais, el extremo parisino volvió a los cánticos insultantes entonados por Virage Auteuil. El incidente provocó una breve interrupción del partido en la segunda parte el domingo por la tarde en el Parque de los Príncipes.
Podrían haber acabado castigando a su equipo, que hizo un muy buen partido contra el OL (3-1), a fuerza de querer hacer lo que quisiera. Afortunadamente para los de Luis Enrique, la interrupción fue momentánea y el aviso no tuvo coste alguno. Los aficionados parisinos corearon cánticos insultantes contra el Lyonnais el domingo por la noche, durante el último partido de la 15ª jornada de la Ligue 1, en el Parque de los Príncipes.
Las repetidas provocaciones de parte del Virage Auteuil provocaron la interrupción del partido durante algunos minutos en la segunda parte. Sin embargo, el locutor del Parque había ordenado a la afición parisina que cesaran estos cánticos en la primera parte, cuando llegaron los primeros insultos desde las gradas. Lamentablemente, los seguidores del club no sólo no hicieron caso a la advertencia, sino que también la corearon durante al menos cinco minutos después de regresar del vestuario.
“El árbitro podrá decidir retrasar el inicio de un partido o interrumpirlo, varias veces si fuera necesario, debido a incidentes graves que pueden provocar o no el regreso de los jugadores y del equipo arbitral a los vestuarios. “El partido no puede comenzar ni reanudarse a menos que hayan cesado los incidentes graves”, indica el artículo 549 del reglamento de la Liga de Fútbol Profesional que los árbitros están obligados a aplicar en tales casos.
El capitán parisino de la noche, Achraf Hakimi, se dirigió a la grada para hacer entrar en razón a la afición y garantizar que el partido no se detuviera definitivamente. “También hablamos con el árbitro y el delegado, nos dijeron que tenía que parar y que íbamos a reanudar el partido”, explicó Ousmane Dembélé en la zona mixta. Autor del primer gol de anoche, el extremo parisino comprendió después la decisión del árbitro de interrumpir el partido. “Son cánticos que son difíciles de escuchar en los estadios. Entiendo perfectamente que el partido esté detenido”.
El partido acabó reanudándose rápidamente, no sin un mensaje final, leído por el locutor y mostrado en la pantalla gigante, dirigido a las gradas de donde procedían los cánticos: “Están prohibidos los cánticos insultantes. El partido podrá ser detenido o perdido”. El comité disciplinario de la LFP sancionó recientemente al club capitalino por cánticos homofóbicos contra sus homólogos del Marsella. El club sufrió el cierre parcial por un partido de la tribuna de Auteuil, que quedó parcialmente vacía durante la visita del Toulouse el 22 de noviembre.
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