El expresidente brasileño de extrema derecha, Jair Bolsonaro, está acusado de “participar activamente” en un golpe de Estado planeado para impedir que Luiz Inácio Lula da Silva, su sucesor electo de izquierda, asumiera el cargo en 2022.
Un informe policial, publicado el martes y de más de 800 páginas, afirma que Jair Bolsonaro también fue informado de un plan llamado “Daga Verde”, que incluía el asesinato de Lula, de su vicepresidente Geraldo Alckmin y del juez del Tribunal Supremo Alexandre. de Moraes.
Hacia una acusación contra el expresidente
El documento, presentado al fiscal general Paulo Gonet, recomienda la acusación de Jair Bolsonaro y otras 36 personas, la gran mayoría de ellos militares. Según este informe, las pruebas demuestran que el ex presidente “planeó […] y participó directa y efectivamente en las acciones de una organización criminal que buscaba derrocar el Estado democrático de derecho. Precisa que el golpe no se produjo “debido a circunstancias que iban en contra de su voluntad”.
En cuanto a la Operación Daga Verde, el informe decía que tenía como objetivo asesinar a las figuras políticas mencionadas después del fracaso de Bolsonaro en ganar la reelección. Este proyecto debería haber sido ejecutado antes de la toma de posesión de Lula el 1 de enero de 2023. La semana pasada, la investigación condujo al arresto de cuatro militares y un policía involucrados en este triple plan de asesinato.
Rechazo categórico a Jair Bolsonaro
Jair Bolsonaro rechaza categóricamente las acusaciones. Durante una rueda de prensa el lunes, denunció “persecución política” en su contra y declaró: “El término ‘golpe de Estado’ nunca ha formado parte de mi léxico. »
Sin embargo, los investigadores creen que el expresidente tenía “plena conciencia” de los “actos clandestinos destinados a abolir el Estado democrático de derecho”. La decisión de procesar o no a Jair Bolsonaro y a los demás acusados ahora está en manos del fiscal general.
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