Un año después de la tragedia que costó la vida a Thomas, un joven de 16 años, en Crépol, la prefectura de Drôme acaba de prohibir varias manifestaciones. En un comunicado, el prefecto justifica su elección por temor a “tensiones entre grupos de ideologías opuestas”.
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Valence, Romans-sur-Isère, Bourg-de-Péage y Crépol. Este fin de semana estaban previstos varios homenajes en estos municipios de Drôme, un año después de la muerte de Thomas, un joven de 16 años, fallecido a causa de una puñalada en una pelea general durante el baile de Crépol (Drôme).
Pero en un comunicado de prensa publicado este lunes 25 de noviembre, el prefecto de Drôme anunció la prohibición de todas las manifestaciones previstas. Para justificar esta decisión, evoca las tensiones ya presentes en la región, en particular por la muerte de otro joven, Nicolas, que jugaba en el mismo club de rugby que Thomas. Le dispararon en la cabeza mientras esperaba entrar a una discoteca.
Estos dos dramas traspasaron las fronteras del club de rugby Romans-Péage y desde entonces han sido objeto de cierta explotación política. Unos días después de la muerte de Thomas, pequeños grupos de extrema derecha lanzaron manifestaciones, a menudo violentas, en los barrios obreros de Valencia, de donde procedían varios sospechosos del asesinato. Personalidades políticas, como un candidato del partido de Eric Zemmour, también habían avivado las brasas, pidiendo “ratonadas”.
La tensión realmente nunca disminuyó. En las últimas semanas, numerosos folletos, cartas y declaraciones públicas han hecho temer al Prefecto “significativos disturbios y enfrentamientos ideológico en Romans-sur-Isère, Bourg-de-Péage, Crépol y Valence, 30 de noviembre próximo”.
Ante estos temores, el prefecto de Drôme, “Garante del respeto al ejercicio del derecho de manifestación pero también del orden público, ha decidido tomar las medidas necesarias, adecuadas y proporcionadas que puedan prevenir posibles perturbaciones en la vía pública” especifica en el comunicado de prensa.
Un año después de la muerte de Thomas, la investigación continúa. Ocho acusados siguen en prisión preventiva.
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