El Athletic redobló esfuerzos para ganar el derbi de San Mamés ante la Real Sociedad. Los leones fueron superiores en la primera parte y demostraron acierto para marcar el gol de la victoria tras una combinación perfectamente ejecutada entre Prados y Nico Williams, que culminó con un cabezazo de Oihan Sancet justo delante de la portería.
No fue el partido del año en La Catedral, pero los tres puntos se quedaron en casa, imprescindible después de tres empates consecutivos ante Mallorca, Betis y Valladolid. Cabe recordar que los leones hicieron un sólido primer tiempo ante los verdiblancos, pero solo lograron el empate por su falta de remate. Ayer fue todo lo contrario. El equipo rojiblanco logró ganar sin multiplicar ocasiones, defendiendo su ventaja en la segunda parte. Eso también es fútbol. Así ganamos.
Valverde sorprendió ofreciendo plaza de titular a Djaló en lugar de Guruzeta. Al extremo le ha costado encontrar su ritmo esta temporada. Sancet volvió a impresionar ante la portería contraria. El jugador navarro empezó bien la temporada, mejor que en años anteriores, pero se vio lastimado por las lesiones, que le provocaron falta de continuidad. El equipo necesita su capacidad para crear juego y su ojo para el gol. Ya ha marcado cinco goles en La Liga.
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Esta victoria permite al conjunto rojiblanco ampliar una distancia de cinco puntos con la Real Sociedad, rival directo por la clasificación europea. Aún queda mucho camino por recorrer en la temporada, pero ya es una buena noticia tener este hueco tras catorce jornadas disputadas.
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