Según el consenso de los inversores, el programa de Trump será inflacionario y los tipos de interés en Estados Unidos se mantendrán altos, “lo que inevitablemente apoyará al dólar”. Sin embargo, para François Pascal, director de gestión diversificada de Mandarine Gestion, “el dólar no podrá subir durante mucho tiempo” y “la reacción de los mercados desde la elección de Donald Trump será sólo temporal”. El presidente electo también indicó que quería aumentar significativamente la producción de petróleo y gas para reducir la factura del consumidor estadounidense.
Además, Arabia Saudita “también podría tener interés en volver a aumentar sus cuotas de producción de petróleo, después de haber acordado reducirlas en la época del Covid”. Según Mandarine Gestion “una caída de los precios de la energía podría contener la inflación y, por tanto, permitir a la Reserva Federal bajar sus tipos, lo que en última instancia limitaría la fortaleza del dólar”.
François Pascal también considera que si la administración Trump promueve el crecimiento de las criptomonedas, se corre el riesgo de competir con el dólar como reserva de valor y, por tanto, debilitar el atractivo de la deuda estadounidense para los inversores.
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