Es uno de los lugares parisinos más interesantes de este otoño. La galería Pill, inaugurada en 2016 en Estambul, se encuentra ahora en París, en la muy elegante Place Valois, en el primer distrito. Por tanto, debemos pasar delante de los turistas, atraídos por la euforia deEmily en París (Están los oficios ficticios del personaje interpretado por lily collins en Netflix), y abren la puerta a este nuevo espacio, que acoge para la ocasión una exposición dedicada al pintor francés de origen polaco Apolonia Sokol. Es conocida por sus pinturas figurativas y feministas; sus últimos trabajos, expuestos en The Pill, no destacan. Desde su compromiso con los pueblos oprimidos, incluidos el Líbano y Palestina, hasta el de las minorías de género, como las personas trans, sus retratos continúan basándose en escenas inspiradas en obras canónicas de la historia del arte y cuestiones políticas en una exposición que toma prestado su nombre (.Volveré a amar cuando esté obsoleto) al poeta afroamericano Audrey Lorde.
Si nos atrevemos a bajar un piso, nos encontramos con el documental Apolonia, Apolonia de Lea Globoque siguió Apolonia Sokol durante trece años con su cámara. Una película presentada esta primavera en el cine y que recorre el recorrido del artista, desde el Lavoir Moderne, el teatro parisino de sus padres, hasta su diploma en Bellas Artes, pasando por su escapada a Estados Unidos y su residencia en la Villa Medici. Capta vívidamente su intimidad y sus emociones, señal de que su heroína se siente perfectamente a gusto frente a la cámara. Y por una buena razón, Apolonia Sokol fue filmado incluso antes de que él naciera: los abrazos de sus padres, su concepción, el parto de su madre… Toda su vida está curiosamente conservada en cintas de vídeo. Lo suficiente como para dar ganas de ir a conocer al artista, que nos recibe con su galerista, una lluviosa tarde de noviembre.
Una estética de la amistad
“Oh, soy un verdadero geek” chistes Apolonia Sokol después de citar a otro pintor “que todos han olvidado” explicando las inspiraciones de sus pinturas, actualmente presentadas en la galería The Pill. Friki tal vez, friki legendario sobre todo. Es el galerista, Suela J. Cennetque usa el adjetivo primero. Formada en Sciences-Po París hace casi veinte años, lo recuerda como un período durante el cual fue “todo el tiempo metido en las Bellas Artes”, justo al lado del Instituto de Estudios Políticos: “Allí conocí a Eva Nielsen, con quien fundé The Pill, y a otros artistas pilares de la galería como Mireille Blanco. Rápidamente, unos años después de su llegada a las Bellas Artes, llegó Apolonia. Todavía no la conocía, mucha gente me hablaba de ella.”. El pintor sabe muy bien decir por qué: “Es porque pintaba todo el tiempo, creo.”. De este período de la vidaApolonia Sokollos archivos se han conservado. Muchos archivos. el documental Apolonia, Apolonia de Lea Globoretransmitido en el sótano de la galería The Pill, arroja nueva luz sobre su viaje, salpicado de dudas (“¿Cómo ser uno de los mejores?”, pregunta en una playa de California) y las ganas absolutas de pintar siempre (“Es pintar sobre todo para mi.”).
Curiosamente, sin embargo, las pinturas deApolonia Sokol nunca antes se había dedicado íntegramente a París, a través de una exposición de la escala de ISLAWIO. La expresión, acrónimo de la frase “Amaré de nuevo cuando esté obsoleto” (en francés: “Amaré de nuevo cuando esté desactualizado”) proviene del poema Los sueños muerden de Audrey Lordefechada en 1968, y ofrecida al pintor por el artista Melodía Lu – “una colección realizada por él, en hojas A4 grapadas”. Un poema que contiene en sus dos estrofas todas las cuestiones exploradas por Sokol en su exposición: la masacre de los inocentes, denominada “la gente del sol”, cuya sangre tiñe la tierra, de cara al “gente de invierno”. Una polarización que resuena, para la artista, con la situación actual, y que le impidió pintar durante varios meses.
Related News :