El ejército libanés anunció el miércoles la muerte de un soldado en un ataque israelí en el sur del Líbano, un día después de un ataque a una de sus posiciones en el que murieron tres soldados.
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“Un soldado murió a causa de sus heridas después de que el ejército israelí atacara un vehículo militar” en una zona fronteriza sur, anunció el ejército libanés en la red social X.
El martes por la tarde, el ejército anunció la muerte de tres soldados en un ataque israelí dirigido a su posición en Sarafand, una ciudad costera a unos cuarenta kilómetros de la frontera.
En imágenes de la AFP podemos ver el puesto del ejército destruido por el ataque. Otras ocho personas resultaron heridas en el ataque, incluidos civiles que se encontraban cerca, según el Ministerio de Salud.
Estos ataques se producen en medio de feroces combates entre Hezbolá proiraní y el ejército israelí en las zonas fronterizas del sur, donde lanzó una ofensiva terrestre el 30 de septiembre.
La Agencia Nacional de Noticias (ANI, oficial) informó de “enfrentamientos violentos” y añadió que las fuerzas israelíes intentaban “avanzar hacia las colinas de Kfarchouba” bajo una intensa cobertura de artillería y aviones.
Hezbolá, por su parte, aseguró el martes por la noche que seguía repeliendo el avance de las fuerzas israelíes, en particular hacia la importante ciudad de Jiam, a unos seis kilómetros de la frontera.
La poderosa formación proiraní se ha atribuido la autoría de una treintena de ataques desde el martes contra fuerzas y posiciones del ejército israelíes en el sur del Líbano y el norte de Israel.
Estos enfrentamientos se producen mientras el enviado presidencial estadounidense, Amos Hochstein, continúa sus conversaciones el miércoles en Beirut con el objetivo de alcanzar un alto el fuego con Israel.
La violencia entre Israel y el movimiento libanés ha dejado más de 3.540 muertos desde octubre de 2023, la mayoría desde que Israel lanzó una campaña masiva de bombardeos y una ofensiva terrestre a finales de septiembre.
Del lado israelí, 79 soldados y 46 civiles murieron en 13 meses.
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