Los Minnesota Timberwolves tenían el partido pendiente ante los Miami Heat, pero una última canasta con falta de Nikola Jovic destrozó las esperanzas de los vecinos del Target Center. ¡Erik Spoelstra ha diseñado un último sistema absolutamente delicioso!
No hay entrenador más peligroso que Erik Spoelstra cuando su equipo pierde por menos de una posesión cuando quedan unos pocos segundos de partido. El táctico del Miami Heat lo volvió a demostrar este domingo ante los Minnesota Timberwolves.
La franquicia de Florida estaba perdiendo por dos puntos y nueve segundos desde la última sirena, demasiado tiempo en la escala de Rico. El técnico decidió colocar a Duncan Robinson en el saque de banda para organizar la obra maestra.
Todos los jugadores del Heat se posicionaron muy lejos de la canasta y del balón para abrir espacio. Mientras Kevin Love colocaba una cortina de humo para Tyler Herro, el mejor jugador de los Heat esta noche, la verdadera acción se desarrollaba a pocos metros de distancia. Terry Rozier escapó de la marca de Nickel Alexander-Walker y le puso una pantalla a Anthony Edwards. Una maravilla de ejecución que permitió a Nikola Jovic destacarse e ir solo a la canasta atrapado, demasiado tarde, por un NAW doblemente defectuoso.
Canasta con la culpa, el serbio no temblará y los Heat se van de Minnesota con un éxito casi inesperado.
Entonces… rara vez he visto eso. pic.twitter.com/bvf27khYty
—TrashTalk (@TrashTalk_fr)
Belgium
Related News :