El presidente ruso, Vladimir Putin, y Donald Trump, que acaba de ganar las elecciones presidenciales de Estados Unidos, han dicho por separado que están dispuestos a hablar entre sí.
Putin dijo que estaba “listo para reanudar el contacto” con Donald Trump. “Creo que vamos a hablar entre nosotros”, afirmó el multimillonario estadounidense, que aseguró durante la campaña que podría poner fin a la guerra en Ucrania “en 24 horas”.
“No podemos simplemente decir ‘(un alto el fuego ahora) y luego ya veremos’. No es viable. Y lo peor es que es irresponsable”, dijo Zelensky durante una conferencia de prensa al margen de una cumbre de la ONU. Comunidad Política Europea en Budapest, refiriéndose a una “retórica muy peligrosa”.
El presidente ucraniano aseguró el jueves que hacer “concesiones a Putin” era “inaceptable para Ucrania y suicida para toda Europa”, repitiendo en parte un discurso pronunciado poco antes.
Los llamados a negociaciones entre Rusia y Ucrania son cada vez más insistentes después de más de dos años y medio de una guerra devastadora, incluso entre algunos de los aliados de Kiev.
El primer ministro húngaro, Viktor Orban, el líder europeo mejor dispuesto hacia Putin, reiteró su llamado el jueves a una tregua en el campo de batalla, para “dar a las partes en conflicto el espacio y el tiempo necesarios para comunicarse y comenzar a negociar la paz”.
“Pérdidas” norcoreanas
Zelensky aseguró por primera vez que los soldados norcoreanos acusados por Kiev y Occidente de estar desplegados en Rusia para apoyar a las fuerzas de Moscú “participaron en las hostilidades” y sufrieron “pérdidas”.
Según él, 11.000 soldados norcoreanos están desplegados en la región rusa de Kursk, de la cual las fuerzas ucranianas han ocupado una pequeña parte desde una ofensiva sorpresa lanzada a principios de agosto.
Corea del Norte está ahora “librando una guerra en Europa”, lamentó.
La elección de Donald Trump a la presidencia estadounidense ha enfriado a Kiev, que teme una retirada de su principal proveedor de armas y financiación en los próximos meses.
“Hablé con el presidente Trump (…), fue una conversación productiva pero, por supuesto, no podemos decir qué acciones específicas tomará”, señaló el jefe de Estado ucraniano.
Por ello, llamó a estadounidenses y europeos a ser “fuertes” y a “valorar” sus relaciones. “Creo que el presidente Trump realmente quiere (lograr) una solución rápida. Pero eso no significa que vaya a suceder”, dijo.
Zelensky también indicó que se había reunido en Budapest con el presidente francés, Emmanuel Macron, y que ambos discutieron la ayuda militar a Ucrania y el entrenamiento de soldados ucranianos en Francia.
“Destrucción de la población”
Sobre el terreno, una serie de ataques rusos dejaron cuatro muertos y 40 heridos en la ciudad de Zaporizhia, en el sur de Ucrania. Según las autoridades locales, las bombas deslizantes alcanzaron un hospital y edificios residenciales.
Los ataques se produjeron horas después de que el jefe del Consejo de Seguridad ruso, Sergei Shoigu, presionara a los aliados occidentales de Kiev para que iniciaran negociaciones con Moscú si querían poner fin a los ataques contra los ucranianos.
“La situación en el teatro de hostilidades no favorece al régimen de Kiev, Occidente tiene una opción: continuar financiando (a Ucrania) y destruyendo a la población ucraniana o admitir las realidades existentes y comenzar a negociar”, dijo. durante una reunión.
Con el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, la pelota está en el tejado estadounidense, afirmó el jueves el jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov.
“Veremos si hay alguna propuesta” de la nueva administración estadounidense, afirmó.
Serie de ataques
Con el aparente deseo de quebrar la moral de la población, Rusia bombardea Ucrania casi a diario.
El jueves, un ataque en la aldea de Mykolaivka dejó dos muertos y cinco heridos, según el gobernador de la región oriental de Donetsk, Vadym Filashkin.
La capital, Kiev, fue objeto de ataques con drones durante casi toda la primera semana de noviembre, según informó la administración militar.
Rusia exige en particular que Ucrania le ceda cinco regiones del país y que renuncie a su ambición de unirse a la OTAN. Condiciones inaceptables para Zelensky, que insiste en la retirada pura y simple de las tropas rusas de todos los territorios ocupados.
Putin volvió a asegurar el jueves que Moscú estaba dispuesta a negociar con Kiev sobre la base de las “realidades actuales” sobre el terreno.
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