Una explosión en la provincia de Baluchistán, en el suroeste de Pakistán, el viernes mató al menos a siete personas, incluidas cinco escolares, e hirió a 23, dijo un funcionario de policía.
“El objetivo era una furgoneta de la policía que iba a recoger a un equipo de vacunación contra la polio”, dijo a Reuters el jefe de la policía local, Rehmat Ullah.
También murió un policía.
La explosión fue provocada por un dispositivo improvisado acoplado a una motocicleta estacionada cerca de una escuela de niñas en la localidad de Mastung.
Ningún grupo se ha atribuido la responsabilidad del ataque.
El primer ministro Shehbaz Sharif condenó el ataque en un comunicado.
Pakistán enfrenta un aumento de los ataques en el noroeste del país y una creciente insurgencia separatista en el sur. El martes, un agente de policía murió en un ataque a una oficina que gestionaba campañas de vacunación contra la polio.
Pakistán lanzó el lunes su tercera campaña nacional de vacunación contra la polio, ya que el número de casos de la enfermedad viral aumentó significativamente. Actualmente hay 41 casos activos en Pakistán.
Pakistán y Afganistán siguen siendo los únicos países donde la polio es endémica. Los combatientes islamistas han atacado anteriormente a equipos médicos, difundiendo información falsa de que las vacunas son parte de un programa de esterilización occidental.
(Reporte de Saleem Ahmed en Quetta, Pakistán, escrito por Ariba Shahid en Karachi; versión francesa Kate Entringer)
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