Las parejas del mismo sexo taiwanesas-chinas ahora pueden registrar legalmente sus matrimonios en Taiwán, anunció Taipei el jueves, reconociendo por primera vez las uniones entre ambos lados del Estrecho.
Taiwán ha estado durante mucho tiempo a la vanguardia del floreciente movimiento por los derechos LGBTQ en Asia, convirtiéndose en el primer territorio de la región en legalizar la igualdad matrimonial en 2019.
Pero las tensiones entre Taiwán y China –que reclama la isla autónoma como parte de su territorio y mantiene movimientos militares diarios a su alrededor– han impedido que las parejas transfronterizas disfruten de ese derecho.
Las parejas heterosexuales con un cónyuge chino y un cónyuge taiwanés enfrentan un procedimiento más complicado que otras parejas internacionales, ya que primero deben casarse en el extranjero y luego someterse a una entrevista en Taiwán antes de registrar su matrimonio allí.
“A partir de ahora, las parejas del mismo sexo pueden estar sujetas a las mismas reglas que las parejas heterosexuales”, dijo Liang Wen-chieh, portavoz del Consejo de Asuntos Continentales de Taiwán, que se ocupa de los asuntos entre ambos lados del Estrecho, en una reunión informativa habitual el jueves.
Primero tendrán que casarse legalmente en uno de los 35 países que reconocen la igualdad matrimonial y, tras presentar su certificado de matrimonio y otros documentos, “los organismos pertinentes realizarán entrevistas con la pareja”, explicó. “Solo después de pasar la entrevista en la frontera (en el aeropuerto y los puertos) podrán entrar al país para registrar su matrimonio. Este es nuestro principio actual para los matrimonios entre ambos lados del Estrecho”, dijo.
El Sr. Liang añadió que las normas que rigen los matrimonios heterosexuales a través del Estrecho están en vigor desde hace mucho tiempo “para impedir matrimonios transfronterizos falsos y evitar problemas de seguridad nacional y orden social”.
Con el anuncio del jueves, “el gobierno mantiene el principio de igualdad de trato entre el matrimonio entre personas del mismo sexo y el matrimonio heterosexual”, añadió.
En la actualidad, en la isla viven unos 360.000 cónyuges chinos de ciudadanos taiwaneses, que deben esperar seis años para solicitar la ciudadanía taiwanesa, el doble que los nacionales de otros países.
Separada de China continental por una estrecha vía fluvial de 180 kilómetros, Taiwán tiene su propio gobierno, ejército y moneda. Pekín ha dicho que nunca renunciará al uso de la fuerza para poner a la isla democrática bajo su control.
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