El gobernador está a la espera del dato final de inflación de diciembre, que el INSEE dará a las 8h45, último componente imprescindible para calcular la nueva tasa del producto estrella de ahorro regulado. François Villeroy de Galhau presentará entonces su propuesta al ministro, quien tomará la decisión final. Eminentemente político, siempre puede reservar sorpresas. La fórmula de cálculo tampoco se aplica sistemáticamente y ha sido objeto de frecuentes excepciones en los últimos años.
Disminución de la inflación
Para su primer ejercicio, Éric Lombard ha preparado el terreno y debería ser fiel a su palabra del 6 de enero sobre France Inter, al aprobar un tipo “en torno al 2,5%”. El descenso, desde el 3% vigente desde hace dos años, es lógico ya que refleja el descenso de la inflación en los últimos meses. Esta sería la primera reducción desde principios de 2020, cuando la tasa pasó del 0,75% al 0,50%. Hay que remontarse al verano de 2013 para encontrar una caída tan significativa, de medio punto porcentual.
Incluso con una cuenta de ahorro A menos rentable, “los ahorros no sólo están protegidos, sino que permiten aumentar los activos reales”, justificó Éric Lombard la semana pasada. Pero la perspectiva de una reducción del tipo de la Livret A es una mala noticia para los 57 millones de poseedores de una “pequeña libra roja”. Sin embargo, ofrece un soplo de aire fresco a los actores que le pagan: los establecimientos bancarios y la Caisse des Dépôts (CDC), que Éric Lombard dirigió hasta su nombramiento como ministro a finales de diciembre.
Saldos pendientes de pago de 582 mil millones de euros
La consecuencia de un recorte de tipos “es muy importante para nosotros”, subrayó el miércoles pasado en BFM Business el director general interino de la “Caisse” Olivier Sichel, “nos permitirá bajar el tipo de interés de los arrendadores sociales”. Esta caída esperada también será vista con buenos ojos por las aseguradoras, que ofrecen un producto de ahorro competidor: el seguro de vida. La tasa Livret A, válida también para los 26 millones de Livrets para el Desarrollo Sostenible y Solidario (LDDS), es la verdadera brújula del mercado del ahorro. En teoría, se revisa dos veces al año.
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