Desde hace varios días circulan en las redes sociales rumores preocupantes sobre una misteriosa epidemia en China que está saturando algunos hospitales y crematorios. Los videos que muestran filas interminables en hospitales con pacientes con máscaras y padres cargando a sus hijos enfermos han alimentado la especulación. Algunos hablan de un regreso de la pandemia, otros están preocupados por la propagación de varios virus respiratorios, incluido el metapneumovirus humano (HMPV). Pero ¿qué sabemos realmente sobre esta situación?
Escenas similares a las de la primera ola de Covid-19
Las imágenes que circulan en Instagram, TikTok y X fueron vistas por millones de personas. Vemos escenas impresionantes: colas en hospitales abarrotados, pacientes enmascarados y crematorios abarrotados. Algunas noticias indican que se ha declarado el estado de emergencia para combatir esta misteriosa epidemia. Sin embargo, esta información no está confirmada ni por las autoridades chinas ni por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los vídeos compartidos en las redes suelen proceder de diferentes épocas y lugares, y algunos de ellos se remontan al año 2022, durante la epidemia de Covid-19 en China. Otros, de finales de 2023, muestran imágenes del hospital infantil del norte de China, cuando circulaban infecciones respiratorias que afectaban principalmente a niños pequeños. Además, la mayoría de las publicaciones virales apuntan a fuentes no confiables como The Epoch Times, conocida por difundir teorías de conspiración.
Entonces, ¿qué está pasando realmente en China? El virus en cuestión, el metapneumovirus humano (HMPV), no es nuevo. Identificado por primera vez en 2001, este virus respiratorio causa síntomas similares a los de un resfriado o una gripe: tos, fiebre, congestión nasal y fatiga. Aunque la mayoría de las infecciones son leves, este virus puede causar complicaciones graves, como neumonía, especialmente en bebés, ancianos y personas con sistemas inmunitarios debilitados.
Se ha observado un aumento de los casos de HMPV en China, particularmente en las provincias del norte, donde los niños se ven particularmente afectados debido a las temperaturas invernales y la actividad interior. Las autoridades chinas no han declarado una emergencia, pero han establecido un programa piloto para rastrear mejor la neumonía de causa desconocida y tratar los casos de manera más efectiva. El Ministerio de Asuntos Exteriores chino tranquilizó a la población señalando que las infecciones respiratorias son habituales en invierno y que la situación es menos grave que el año pasado.
No es una crisis global, sino una situación que vale la pena monitorear
A nivel mundial, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no ha declarado este brote como una crisis sanitaria global. Aunque la situación en China ha llamado la atención, el HMPV se considera un virus estacional, similar a otros virus respiratorios. En algunos países vecinos, como Camboya y Taiwán, se han emitido advertencias sobre mayores riesgos para los niños y las personas vulnerables. Sin embargo, no se ha emitido ninguna alerta de pandemia y las autoridades sanitarias, particularmente en India, han asegurado que este virus no provocará un pánico generalizado.
Las autoridades chinas continúan gestionando la situación con mayores medidas de vigilancia y garantizando que los hospitales y clínicas tengan los recursos necesarios para hacer frente a este brote invernal. Es importante recordar que, a diferencia del Covid-19, no existe una vacuna específica para el HMPV y el tratamiento se basa principalmente en el manejo de los síntomas.
En resumen, aunque las imágenes de colas y hospitales superpoblados recuerdan a los primeros días de la pandemia de Covid-19, es importante matizar la situación actual. El virus responsable de esta epidemia, el metapneumovirus humano, es un virus respiratorio estacional cuyos síntomas son generalmente leves. No se ha declarado ningún estado de emergencia y China, al igual que la OMS, resta importancia a la gravedad de la situación y la califica de fenómeno invernal recurrente.
Aunque la situación requiere seguimiento, actualmente no hay motivos para hablar de una nueva pandemia. Las autoridades sanitarias mundiales están siguiendo de cerca la evolución de los casos individuales, pero actualmente no hay riesgo de una crisis sanitaria mundial. Por eso es importante distinguir los hechos de las especulaciones, especialmente en las redes sociales, y seguir las recomendaciones de las autoridades pertinentes.