Designado el lunes, Sergio Conceiçao dispuso sólo de tres días para preparar su primer partido al frente del AC Milan contra la Juventus, club en el que juega su hijo Francisco. El tiempo que tenía para influir en su equipo era limitado, pero el técnico portugués aprovechaba la más mínima ocasión para transmitir sus principios, como ayer, encadenando encuentros con los medios, pese a la fiebre del 39. “Intentamos trabajar en todos los pequeños detalles: el juego, la táctica, las jugadas a balón parado. Lo importante es la dinámica de los jugadores, lo que hacen con y sin balón, ser compactos, agresivos y saber dónde presionar al rival”.explicó a Mediaset. Antes de acudir a una rueda de prensa, lo acompañará Mike Maignan, cuyo liderazgo está cobrando aún más impulso en este difícil período. “Llevo un tiempo aquí, conozco a los muchachos y hago lo que puedo, con naturalidad”confió el portero francés.
-
-