La ciudad de Lyon anunció el viernes que prohibirá “la venta, la posesión y el uso de cartuchos de gas de óxido nitroso en los espacios públicos”, denunciando una “flagela nacional” cuando se utiliza con fines recreativos como el “gas de la risa”, principalmente por adolescentes y adultos jóvenes.
“Con esta medida, nuestra prioridad sigue siendo proteger la salud y garantizar la seguridad” de todos, explica Mohamed Chihi, teniente de alcalde ecologista, delegado de seguridad y firmante del decreto municipal, citado en un comunicado. Las infracciones se sancionarán con una multa máxima de 150 euros. Otras ciudades ya han emitido órdenes en el mismo sentido. En Montpellier, por ejemplo, la venta y el consumo de óxido nitroso se castiga con una multa de 68 a 450 euros.
Un gas calificado de “flagelo nacional”
Calificando el uso indebido de este gas de “flagelo nacional”, el diputado pide “una fuerte movilización del Estado sobre este problema”.
El óxido nitroso está clasificado como una “sustancia venenosa”. En Francia, el gobierno prohibió su venta a menores y restringió las cantidades a la venta.
“Su consumo puede tener graves consecuencias para la salud y, en particular, provocar trastornos neurológicos, o incluso complicaciones hematológicas o psiquiátricas”.
Utilizado en la cocina para los sifones de Chantilly y en medicina como analgésico, su mal uso lo ha hecho popular entre los jóvenes. Su efecto instantáneo, una risa irresistible, le valió el sobrenombre de “gas de la risa”.
En 2023, los servicios metropolitanos recogieron más de 7 toneladas de bombonas vacías de gas óxido nitroso en Lyon y 25 toneladas en toda la metrópoli.
Con AFP
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