La noche del 24 al 25 de noviembre, un incendio arrasó el estratégico aparcamiento de SOROUBAT en Kantoro, poniendo en peligro un proyecto viario clave para Benin.
La noche del domingo 24 al lunes 25 de noviembre de 2024, un espectacular incendio arrasó el aparcamiento de la Société des Routes et Bâtiments (SOROUBAT) en Kantoro, en el norte de Benín. Este acto, calificado de sabotaje por fuentes locales, fue presuntamente llevado a cabo por sujetos armados no identificados (IANI). El incidente, aunque no causó pérdidas humanas, plantea muchas preguntas y compromete un proyecto vial de importancia estratégica.
Un estacionamiento estratégico apuntado
El aparcamiento quemado estaba situado en el distrito de Guéné, municipio de Malanville. Sirve como base logística para las obras de construcción y asfaltado de la carretera Guéné-Karimama, una infraestructura clave para la región. Con 50 kilómetros de longitud, esta ruta tenía como objetivo fortalecer el comercio y abrir esta zona.
La fatídica noche, alrededor de la una de la madrugada, los atacantes irrumpieron y atacaron directamente las instalaciones. Varios motores pesados desplegados por SOROUBAT en el lugar quedaron destruidos. Según testimonios, las llamas envolvieron rápidamente las máquinas, dejando tras de sí un espectáculo de desolación.
Daños materiales colosales
Aunque no se perdieron vidas, el impacto material fue considerable. Varios equipos cruciales para el avance de la obra quedaron reducidos a cenizas. Aunque no se ha revelado el número exacto de motores quemados, una fuente local describió una situación crítica.
La carretera Guéné-Karimama, actualmente en construcción, tiene una importancia capital para el desarrollo económico del norte de Benin. Por lo tanto, este sabotaje representa un importante revés para las ambiciones infraestructurales del país.
¿Quiénes son los autores de este acto?
La identidad de los responsables sigue siendo un misterio por el momento. Sin embargo, surgen varias hipótesis. Algunos señalan a los grupos armados extremistas activos en esta región fronteriza con Níger. Su modo de operar, a menudo caracterizado por ataques dirigidos a infraestructuras, refuerza esta idea.
Otros plantean la posibilidad de un acto malicioso vinculado a rivalidades locales o intereses opuestos a la realización del proyecto. El norte de Benin, aunque relativamente estable en comparación con sus vecinos, sigue siendo vulnerable a influencias externas y tensiones internas.
Un desafío de seguridad para Benin
Este incidente pone de relieve los desafíos de seguridad que enfrenta Benin, particularmente en sus regiones del norte. Aunque el país ha realizado esfuerzos considerables para fortalecer la seguridad, este ataque pone de relieve la necesidad de intensificar las medidas de protección en torno a proyectos estratégicos.
Para SOROUBAT, este incendio es un duro golpe. La compañía no sólo tendrá que reponer los equipos destruidos, sino también revisar su sistema de seguridad para evitar nuevos ataques.
¿Un proyecto en peligro?
Las consecuencias de este incendio van mucho más allá de los daños materiales. El retraso provocó riesgos de comprometer la confianza de las poblaciones locales y de los socios financieros en la capacidad de llevar a cabo proyectos a gran escala.
Si bien las autoridades prometen una investigación exhaustiva para identificar y castigar a los responsables, la prioridad sigue siendo la rápida reanudación del trabajo. Los habitantes de la región esperan con impaciencia la finalización de esta ruta, sinónimo de apertura y oportunidades económicas.