Los tres sospechosos arrestados son uzbekos.

Nueva información proporcionada por las autoridades. Tres sospechosos arrestados en Emiratos Árabes Unidos por el asesinato de un rabino israelí-moldavo son de Uzbekistán, dijeron el lunes las autoridades del Estado del Golfo, que ahora buscan determinar sus motivos.

El cuerpo de Tzvi Kogan, de 28 años, desaparecido desde el jueves en los Emiratos, donde se encontraba, fue encontrado sin vida el domingo por las autoridades emiratíes, provocando la indignación en Israel. Su asesinato fue inmediatamente descrito como un “acto atroz de terrorismo antisemita” por el gobierno israelí. “Las autoridades competentes […] reveló la identidad de las tres personas que llevaron a cabo el asesinato y que son de nacionalidad uzbeka: Olimbay Tohirovich (28 años), Makhmudjon Abdurakhim (28 años) y Azizbek Kamilovich (33 años)”, escribió la agencia oficial emiratí WAM. , citando un comunicado de prensa del Ministerio del Interior. Los servicios de seguridad intentan ahora “esclarecer los detalles, las circunstancias y las motivaciones del crimen”, añadió la misma fuente.

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Detenido el domingo

El domingo, las autoridades del país predominantemente musulmán del Golfo dijeron que tres sospechosos habían sido arrestados después del asesinato del rabino, sin dar detalles de sus identidades. El rabino Tzvi Kogan fue emisario de Jabad Lubavitch, un movimiento jasídico ultraortodoxo con un compromiso misionero global destinado a fortalecer la identidad judía y acercar a los judíos a su fe.

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Este movimiento indicó que el funeral del rabino se llevaría a cabo este lunes alrededor de las 23.00 hora local (21.00 GMT) en el Monte de los Olivos en Jerusalén Este, una zona de la Ciudad Santa ocupada y anexada por Israel desde 1967. Su cuerpo fue repatriado a Israel a mitad del día, anunció la organización israelí Zaka, encargada de rescatar y recoger los restos de los fallecidos.

El gran rabino de los Emiratos, Elie Abadie, expresó el lunes a la AFP la “tristeza y la conmoción” de la comunidad judía de este Estado del Golfo, añadiendo que la ley debe aplicarse con “todo su rigor” contra los autores. “Este acto trágico y terrorista de asesinato de un judío inocente es una afrenta a toda la comunidad judía y a la coexistencia pacífica en los Emiratos Árabes Unidos”, dijo.

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Incluso antes de que los Emiratos anunciaran el arresto de los tres sospechosos, el gobierno israelí denunció “un acto atroz de terrorismo antisemita”. “Israel utilizará todos los medios a su disposición para garantizar que se haga justicia y que los responsables de su muerte rindan cuentas”, dijo en un comunicado.

Netanyahu denuncia “despreciable ataque terrorista antisemita”

En un vídeo difundido por sus servicios durante un consejo de ministros, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, denunció también un “despreciable ataque terrorista antisemita” y prometió que su país “utilizará todos los medios y se ocupará de los asesinos de Tzvi Kogan y de aquellos que los envió. Emiratos Árabes Unidos es uno de los países árabes que normalizó relaciones con Israel bajo los Acuerdos de Abraham de 2020, impulsados ​​por Donald Trump durante su primer mandato en la Casa Blanca.

Sin embargo, las autoridades israelíes renovaron la advertencia a los israelíes de que evitaran todos los viajes no esenciales al país y aconsejaron a los ciudadanos que ya estaban allí que tomaran precauciones adicionales. Por su parte, Estados Unidos denunció “un crimen horrible contra todos aquellos que defienden la paz, la tolerancia y la convivencia”.

Extremadamente discretas hasta ahora en este asunto, las autoridades emiratíes han presentado constantemente a Tzvi Kogan como ciudadano moldavo, ocultando su nacionalidad israelí. Los Emiratos, una federación de siete emiratos estrechamente controlada por la familia gobernante, se enorgullecen de ser un país tolerante y seguro. No hay una cifra oficial sobre el número de judíos en los Emiratos Árabes Unidos, pero un funcionario israelí dijo a la AFP que alrededor de 2.000 israelíes residían en el país, y que la comunidad judía se estimaba en unos 4.000.

El asesinato del rabino afecta especialmente a la comunidad israelí, cuyos miembros se mantienen discretos mientras las tensiones regionales se exacerban por la guerra en Gaza, desencadenada por el ataque del movimiento islamista palestino Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023.