Desde Cantabria anunciaron que el Plan de lucha contra incendios forestales de la Comunidad Foral para el próximo año se basará en una inversión que se prevé rondará los 8,4 millones de euros y tendrá como objetivo, tanto prevención y reducción de daños que estos incendios pueden provocar.
El Boletín Oficial de Cantabria (BOC) ha publicado hoy la resolución de la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación por la que se aprueba el Plan Anual de Lucha contra los Incendios Forestales de Cantabria para 2025, que prevé una inversión de más de 8,4 millones de euros para minimizar el daño ecológicoEconómico y social producido por los incendios forestales en la Comunidad Autónoma.
Medidas contra incendios forestales
Entre las medidas que se deben implementar, garantizar una adecuada cobertura territorial de camiones y flotas de vehículos de bomberos; revisar las necesidades de recursos aéreos y completar la red de puntos de recarga; mejorar el sistema de comunicación; implementar un programa de educación continua para personal del Operativo de Extinción de Incendios Forestalesy garantizar la provisión y uso correcto de equipos de protección personal.
También avanzar en la investigación de las causas de los incendios forestales y sus motivaciones; mejorar la línea de financiación dedicada a las inversiones colectivas; implementar compromisos agroambientales en áreas agrícolas, así como mantener y mejorar hábitats y actividades agrícolas tradicionales que preserven la biodiversidad e integren sistemas de pastoreo innovadores y acciones de desmonte y el mejoramiento de pastos para obtener un bosque productivo, rico en biodiversidad y resiliente a los incendios.
Asimismo, formular un protocolo técnico encaminado a determinar las áreas quemadas que requieran acciones de restauración; ejecutar las acciones e inversiones de restauración diseñadas en bosques públicos para mejorar senderos; gestionar los recursos forestales y prevenir incendios.
En el marco del Plan Estratégico de Prevención y Lucha contra los Incendios Forestales de Cantabria 2023-2027, el objetivo de este plan anual para el año 2025 es que la porcentaje de incendios forestales que logran mantenerse ardiendoes decir en una superficie inferior a una hectárea, es superior al promedio de los últimos 10 años, que es del 27,6%.
El nuevo Plan concluye que en los últimos años la mayoría de ellos son intencionados y que su principal motivación radica en evitar los desmontes asociados a prácticas ganaderas, y el número de incendios forestales casi se ha duplicado en Cantabria, pasando de 565 registrados en 2018 a 959 ocurridos en 2022, siendo las zonas interiores occidental y oriental las que Cada vez persisten más incendios forestales y los municipios como Vega de Pas, Soba, Cabuérniga, Rionansa, Selaya, San Roque de Riomiera, Miera y Los Tojos representan en conjunto más del 50% de la superficie quemada entre 2018 y 2022.
En cuanto a su distribución mensual, los meses de febrero, marzo y abril acumulan más del 65% de los incendios registrados y casi el 70% de la superficie quemada, registrándose incendios en todas las épocas del año y la mayor parte del tiempo. Los incendios forestales registrados no superan las 25 hectáreas.aunque entre 2018 y 2022 se registraron 3 grandes incendios de más de 500 hectáreas, que afectaron a más de 2.000 hectáreas.
El nuevo Plan fija periodos de Peligro de incendios forestales para toda Cantabria el período comprendido entre el 1 de febrero y el 30 de abril, y del 1 de agosto al 15 de octubre para las regiones de Liébana, Campoo y Los Valles, teniendo en cuenta que estos períodos de peligro podrán alargarse, acortarse o aparecer otros períodos según cada año. .
Ante tal situación, el Plan establece una serie de medidas preventivas, como las autorizaciones obligatorias para el uso de cualquier tipo de fuego, tanto en suelo urbano como rural; medidas para proteger los bienes de interés cultural; inclusión del riesgo de incendio en las guías de intervención municipales; Planes de autoprotección ante el riesgo de incendio forestal.; actualizar datos sobre periodos de peligro y riesgo de incendios forestales; información de la población; programa de perforación; programa de ejercicio y entrenamiento; cheques; exámenes periódicos y extraordinarios y un plan de formación.
También determina prohibiciones de uso del fuego, regula el uso social y el acceso del público durante los periodos de riesgo de incendio forestal y prevé una serie de actuaciones para mitigar y adaptar los ecosistemas forestales, autorizando programas de ayudas a la mejora y uso sostenible de los bosques para entidades públicas locales y entidades privadas, así como ayudas para el fomento y extracción de biomasa, así como ayudas para la mejora de praderas de uso común en terrenos públicos.
El Plan de Incendios Forestales pretende reducir considerablemente el número de incendios, logrando prevención, información y limpieza y que en caso de que ocurrieran, los incendios sólo seguirían siendo incipientes.