Para evitar este tipo de ataques en el futuro, la VSOA cree que son posibles ciertas soluciones. “Llevamos mucho tiempo pidiendo que se suprima la inscripción de los nombres de los agentes en su ropa. Si los detenidos conocen los nombres, es fácil rastrear a los agentes en su vida privada”, explicó De Smedt.
La unión liberal también aboga por la tolerancia cero. “Las agresiones dentro de las cárceles deberían ser castigadas con mayor severidad. El ataque a personas que simplemente hacen su trabajo es inaceptable, al igual que el ataque a la familia de un funcionario de prisiones”, añadió el sindicalista. Este último señala también el hacinamiento carcelario, denunciado desde hace tiempo. “Esto conduce con demasiada frecuencia a ataques”, concluyó De Smedt.
Los sindicatos del frente único anunciaron el jueves una nueva huelga del personal en las prisiones de Bruselas y Flandes del 5 al 6 de diciembre. El objetivo de esta acción es denunciar la escalada de agresiones por parte de presos y el hacinamiento carcelario, considerada una de las causas de este aumento de la violencia.