Marruecos se enfrenta a un aumento de los ciberataques, un gran desafío para su seguridad nacional. Durante una intervención en el Parlamento, Abdellatif Loudiyi, Ministro Delegado encargado de la Administración de Defensa Nacional, reveló cifras alarmantes y describió las medidas adoptadas para reforzar la ciberseguridad, proteger las infraestructuras esenciales y contrarrestar las crecientes amenazas cibernéticas.
El Reino está experimentando un aumento constante en el número de ataques cibernéticos, un fenómeno que plantea serias preocupaciones de seguridad nacional. Esta observación fue hecha por Abdellatif Loudiyi, quien planteó esta cuestión durante una intervención ante la Comisión de Asuntos Exteriores y Defensa Nacional del Parlamento. Este discurso se enmarca en la presentación del presupuesto de su departamento para el año 2025, y destaca los esfuerzos realizados para proteger las infraestructuras críticas del país contra las ciberamenazas.
Abdellatif Loudiyi reveló que la Dirección General de Seguridad de los Sistemas de Información (DGSSI), bajo la supervisión de las Fuerzas Armadas Reales (FAR), había detectado un total de 644 ataques dirigidos a plataformas electrónicas en todo el país. Estos ataques son de naturaleza variada y se dirigen principalmente a sistemas informáticos e infraestructuras sensibles. De estos 644 ataques, 134 requirieron intervención directa para ser neutralizados, lo que refleja la persistencia y la creciente sofisticación de las ciberamenazas que enfrenta el Reino. Sin embargo, esta situación pone de relieve la vulnerabilidad de los sistemas digitales, particularmente los relacionados con la gestión de los servicios públicos, la seguridad nacional y la economía.
Para responder a estas amenazas, la DGSSI ha tomado medidas concretas encaminadas a reforzar la ciberseguridad. En particular, llevó a cabo una evaluación integral de seguridad de 64 plataformas electrónicas y móviles consideradas vitales para el buen funcionamiento del país. Estas plataformas, que incluyen sistemas utilizados en sectores clave del gobierno, la economía y la infraestructura crítica, han sido sometidas a una vigilancia reforzada para evitar intrusiones maliciosas.
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La DGSSI también activó el Centro de Seguimiento, Vigilancia y Respuesta a Ataques Informáticos (maCERT), una estructura dedicada a la gestión de incidentes cibernéticos. Este centro emitió 16 alertas sobre vulnerabilidades críticas, lo que permitió alertar a tiempo a los interesados y tomar medidas correctivas antes de que los ataques causaran daños importantes. Además, la DGSSI ha publicado 1.050 avisos de seguridad y 575 boletines para los interesados, con el fin de compartir información y buenas prácticas en seguridad informática.
Además de estas medidas reactivas, la DGSSI también realiza una labor preventiva a través de ejercicios de formación y sensibilización. En este sentido, organizó el ejercicio Cyber Training 2024, una simulación de ciberataques destinada a formar a los equipos de seguimiento de instituciones e infraestructuras críticas. En este ejercicio participaron 73 equipos, lo que permitió poner a prueba la capacidad de respuesta de los diferentes actores ante situaciones de crisis informáticas.
Otra parte importante del esfuerzo por mejorar la ciberseguridad de Marruecos es la creación del concurso Cyber Challenge (CTF). Esta iniciativa tiene como objetivo impulsar la excelencia en ciberseguridad alentando a profesionales y estudiantes a resolver desafíos complejos de seguridad de TI. Este tipo de competición ayuda a promover la innovación y la investigación en el campo de la ciberseguridad, formando una nueva generación de talentos capaces de responder a los retos tecnológicos del mañana.
A nivel internacional, Marruecos participa activamente en iniciativas de cooperación en materia de ciberseguridad. Así, la DGSSI participó en ejercicios de colaboración internacional y organizó la quinta edición del Foro de Ciberseguridad, un gran evento que reunió a cerca de 500 responsables, expertos y profesionales de la ciberseguridad. Este foro, que acogió a participantes de países africanos y árabes, permitió fortalecer los intercambios y promover la cooperación regional en esta área estratégica.
