La fascinante miniserie “The Killer Code” rastrea el revolucionario descubrimiento de las huellas genéticas y su uso para resolver su primera investigación criminal.
La pepita llegó del otro lado de la Mancha y merecía ser retransmitida en Francia. Arte ha programado la miniserie británica El código asesinoa partir del jueves 21 de noviembre a las 20.55 horas. En sólo tres episodios de 45 minutos, el programa creado por el guionista Michael Crompton (conocido por inspector barnaby o Casos no clasificados) nos traslada a la Inglaterra de los años 80, entre el thriller y el gran avance científico.
La trama, llena de giros y vueltas, comienza en noviembre de 1983, cuando el cuerpo sin vida de Lynda Mann, una chica de 15 años, fue encontrado cerca de Leicester. La investigación se estanca a pesar de los esfuerzos del inspector jefe David Baker, notablemente interpretado por David Threlfall. Unos años más tarde, en julio de 1986, otra niña de la misma edad, Dawn Ashworth, fue asesinada en circunstancias similares. La policía rápidamente sospecha que el mismo asesino está trabajando.
En paralelo, El código asesino sigue el trabajo del genetista Alec Jeffreys, brillantemente interpretado por John Simm. Este científico de la Universidad de Leicester está desarrollando una técnica revolucionaria: la prueba de huella genética. Su método permite identificar a un individuo basándose en variaciones en su ADN. Utilizada por primera vez para demostrar vínculos familiares, esta prueba resultará ser una herramienta valiosa para confundir o exonerar a los sospechosos.
Porque efectivamente es una historia real la que aquí se propone. Cuando un joven de 17 años se convierte en el sospechoso número uno de un doble asesinato, la policía se pone en contacto con Alec Jeffreys. Esta es la primera vez que su descubrimiento se utiliza en un caso penal. En última instancia, la prueba demostrará la inocencia del sospechoso. Luego seguiría una vasta campaña para tomar huellas genéticas de 5.000 hombres en la región, algo inaudito en ese momento. Un nuevo tipo de búsqueda para identificar al culpable…
“Thriller cautivador” para “un gran avance científico”
Los críticos son unánimes al elogiar la calidad de El código asesino y esta inmersión en una historia real que cambió la persecución del crimen para siempre. Para Télé Loisirs, se trata de un “thriller cautivador que destaca perfectamente un importante avance científico”. La revista Télérama, a menudo una de las más severas, elogia “una trama de alto nivel, protagonizada por actores notables”.
la fuerza de El código asesino De hecho, se trata de mezclar hábilmente los hilos de la investigación policial y los de la búsqueda científica. Nos cautiva esta apasionante historia que nos emociona al ritmo de las esperanzas y decepciones de investigadores e investigadores. La cuidada producción de James Strong (Broadchurch, médico que) infunde una tensión permanente y una atmósfera pesada, fiel al espíritu del thriller británico.
Los intérpretes son todos impecables. Además de las actuaciones ya mencionadas de David Threlfall y John Simm, recordaremos la de Anna Madeley en el papel de Sue Jeffreys, la esposa del científico. Su pareja unida ante la adversidad aporta una conmovedora nota de humanidad al conjunto.