Los fabricantes británicos volvieron a crecer el mes pasado después de una larga desaceleración, según una encuesta publicada el lunes, pero el aumento de los precios cobrados por las empresas podría llevar al Banco de Inglaterra a mantenerse cauteloso a la hora de recortar los tipos de interés.
La lectura final del índice de gerentes de compras del sector manufacturero del S&P Global UK de mayo subió de 49,1 en abril a 51,2, su nivel más alto desde julio de 2022, cuando el aumento de los precios energéticos empezaba a afectar al sector.
Mayo marca la segunda vez en 22 meses que el índice supera el umbral de crecimiento de 50,0, aunque es ligeramente inferior a la lectura preliminar de mayo de 51,3.
Los niveles de producción y los nuevos pedidos aumentaron al ritmo más rápido desde principios de 2022 y la recuperación fue generalizada.
“Si bien la última recuperación dependió de un fortalecimiento del mercado interno, hubo señales de que la demanda externa también se estaba acercando a la estabilización”, dijo Rob Dobson, director de S&P Global Market Intelligence.
La proporción de fabricantes que pronostican un aumento de la producción dentro de un año aumentó al 63%, y el sentimiento alcanzó su nivel más alto desde julio de 2022, pero algunos se preocupan por la incertidumbre política en el país y en el extranjero. Gran Bretaña celebra elecciones nacionales el 4 de julio.
Los precios de fábrica experimentaron su mayor aumento en un año, luego de una quinta aceleración mensual consecutiva en los aumentos. Sin embargo, un aumento más lento de los costos debería ayudar a evitar que las presiones sobre los precios se afiancen, dijo Dobson.
El Banco de Inglaterra está siguiendo de cerca las señales de que las presiones sobre los precios en la economía del Reino Unido se han aliviado lo suficiente como para recortar las tasas de interés por primera vez desde el inicio de la pandemia de coronavirus en 2020. (Reporte de William Schomberg; escrito por Susan Fenton)
