Los bomberos de Ginebra intervinieron este lunes por la mañana poco antes de las nueve de la mañana en un incendio en un aparcamiento de la calle Le-Corbusier, en el barrio de Champel. En el segundo sótano se incendiaron dos vehículos. El Servicio de Bomberos y Salvamento de Ginebra (SIS) indica que las llamas fueron completamente contenidas.
Sin embargo, aún quedaba mucho trabajo por hacer, porque se había desprendido una gran cantidad de humo negro que invadió el local, provocando “daños importantes a los vehículos estacionados en ambos niveles del aparcamiento”.
Fue necesario realizar una larga operación de extracción de humos, explica el SIS en un comunicado de prensa, “movilizando siete potentes turboventiladores, incluido uno montado en nuestro nuevo robot de intervención, utilizado por primera vez durante una intervención”.
Se precisa que una persona molesta por el humo fue trasladada en ambulancia al hospital. Y que los apartamentos del edificio “afortunadamente no se vieron demasiado afectados por el humo del incendio”.
Hace un mes, el SIS presentó sus dos nuevos robots, llamados Eve y Wall-E. Cada uno pesa 700 kilos, puede transportar 800 kilos y tiene un cañón “con una capacidad de 2.000 litros por minuto, que puede proyectar agua a 30 metros”, informó RTS. Estas máquinas con orugas de la empresa francesa Shark Robotics se controlan de forma remota. Estos tanques en miniatura equipados con sensores y cámaras deben poder sondear un entorno hostil.
La compra de Eve y Wall-E fue posible gracias a la ayuda de un mecenas anónimo. Cada uno cuesta alrededor de 400.000 francos.
