Un ataque ruso “dañó” una presa en un embalse en el este de Ucrania, provocando un aumento significativo del nivel del agua de un río y creando “una amenaza” de inundaciones para las comunidades vecinas, confirmó el lunes el gobernador local.
“Los rusos dañaron la presa del embalse de Kurakhové”, dijo Vadym Filashkin en Telegram.
“Este ataque amenaza potencialmente a los residentes de las localidades situadas a orillas del río Vovcha, en las regiones de Donetsk y Dnipropetrovsk”, añadió.
El nivel del agua de este río cerca del pueblo de Velyka Novossilka “aumentó 1,2 metros”, pero “hasta el momento no se ha informado de ninguna inundación”, afirmó el gobernador.
Este embalse está situado cerca de la localidad de Kurakhové, en las inmediaciones del frente, en una zona donde las tropas rusas se han acercado desde el este en las últimas semanas.
En junio de 2023, una enorme presa de la era soviética en la región de Kherson, en el sur de Ucrania, quedó parcialmente destruida, lo que derramó miles de millones de litros de agua río abajo e inundó decenas de aldeas a orillas del río Dnieper.
Kiev acusó a Rusia, cuyas tropas controlaban la presa en ese momento, de volarla para frustrar una contraofensiva ucraniana planeada. Moscú, por su parte, acusó a Ucrania.
Decenas de personas murieron en las inundaciones tras la rotura de la presa, que también causó importantes daños medioambientales en el sur de Ucrania.
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