Ud.na semana después de las mortíferas inundaciones que se produjeron en los alrededores de Valencia, la pesadilla sigue sin acabar en España. Barcelona y las zonas costeras alrededor de la ciudad fueron puestas en alerta roja por precipitaciones este lunes 4 de noviembre por la agencia meteorológica española Aemet.
La Aemet advierte de que “se pueden acumular más de 180 litros por metro cuadrado en 24 horas” en algunos lugares. El nivel de vigilancia rojo significa un riesgo extremo para la vida de los residentes y para la infraestructura. Las personas presentes en el lugar deben encontrar un lugar seguro y no abandonarlo a menos que exista una razón imperiosa.
Ya durante la noche del domingo al lunes, fuertes lluvias azotaron Cataluña, en particular la ciudad costera de Tarragona, a una hora en coche al sur de Barcelona, provocando el desbordamiento del río Francolí.
El costo humano de las inundaciones asciende actualmente a 217 muertes. Incluyendo 213 fallecidos sólo en la Comunidad Valenciana, tres en Castilla-La Mancha y uno en Andalucía. Esta cifra, que aún podría empeorar, es la más alta desde las inundaciones que dejaron 300 muertos en octubre de 1973 en el país. Se movilizaron refuerzos militares.
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