45 años después de la toma de rehenes en la embajada de Estados Unidos en Teherán, miles de iraníes se manifiestan cantando “Muerte a Estados Unidos”. Las tensiones siguen siendo altas entre los dos países, en un contexto de amenazas de Israel. ¿Qué futuro para las relaciones iraníes?
Este domingo 4 de noviembre, en las calles de Teherán y de muchas ciudades iraníes resonaron los lemas “Muerte a América” y “Muerte a Israel”. Miles de manifestantes se reunieron para conmemorar el 45 aniversario de un hecho que marcó un punto de inflexión en las relaciones entre Irán y Estados Unidos: la toma de rehenes en la embajada estadounidense en Teherán en 1979.
Una mirada retrospectiva a un acontecimiento histórico
El 4 de noviembre de 1979, menos de un año después de la revolución islámica que derrocó al Sha, un grupo de estudiantes iraníes irrumpió en la embajada de Estados Unidos en Teherán, sospechosos de ser un “nido de espías”. 52 diplomáticos estadounidenses fueron retenidos como rehenes durante 444 días, hasta su liberación en enero de 1981. Este traumático acontecimiento provocó la ruptura de las relaciones diplomáticas entre los dos países, que nunca se han restablecido desde entonces.
Miles de iraníes en las calles
45 años después, el resentimiento sigue siendo fuerte del lado iraní. Este domingo, una multitud impresionante se reunió frente a la antigua embajada estadounidense en Teherán. Ondeando banderas iraníes y palestinas, los manifestantes corearon consignas hostiles a Estados Unidos e Israel. Según una fuente presente en el lugar, se llevaron a cabo manifestaciones similares en muchas otras ciudades del país.
Los israelíes y los estadounidenses no pueden sobrevivir masacrando a los musulmanes, siempre les advertimos que si no cambian su comportamiento, avanzarán hacia el colapso y la destrucción.
General Hossein Salami, jefe de la Guardia Revolucionaria
Un contexto de intensificación de las tensiones
Esta demostración de fuerza se produce en un contexto particularmente tenso. A finales de octubre, Israel admitió por primera vez haber atacado objetivos militares iraníes, en represalia por ataques con misiles. Irán ha prometido responder a su vez. Mientras tanto, Estados Unidos acaba de anunciar el envío de refuerzos militares a Oriente Medio para “defender a Israel” y enviar una advertencia a Teherán.
Por su parte, el líder supremo iraní Ali Jamenei ha prometido responder a cualquier ataque contra Irán o sus aliados en la región. La República Islámica sigue apoyando movimientos como el libanés Hezbollah y el palestino Hamas, que se oponen ferozmente a Israel.
¿Qué futuro para las relaciones iraní-estadounidenses?
En este clima explosivo, es difícil imaginar un deshielo a corto plazo entre Irán y Estados Unidos. El acuerdo nuclear iraní, del que Washington se retiró en 2018, parece muy frágil. Los esfuerzos de mediación europeos hasta ahora no han logrado que los dos países vuelvan a la mesa de negociaciones.
Para muchos iraníes, la toma de rehenes de 1979 sigue siendo un acto fundacional, el símbolo de su resistencia al “imperialismo estadounidense”. 45 años después, las consignas no han cambiado y la desconfianza sigue intacta. Sólo un gesto firme y concesiones de ambas partes podrían tal vez permitir escribir una nueva página. Pero en el contexto actual esto todavía parece muy hipotético.