El reciclaje también destaca por su presencia en la joyería, especialmente en el caso del oro. Las jóvenes marcas Sophie Bille Brahe, en Dinamarca, Monica Vinader, en el Reino Unido, o incluso Héloïse & Abélard, en Francia, afirman fabricar sus joyas con “oro reciclado” cuando los pesos pesados, como Cartier, Bulgari o Boucheron, indican recurrir a cada vez más. La casa de moda Prada entró en el mercado de la joyería en 2022, garantizando que el 100% de su oro sería reciclado y cumpliría los estándares del Responsible Jewellery Council (RJC), una organización sin fines de lucro fundada en 2005 que lucha por una joyería más responsable.
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La expresión “oro reciclado” se refiere a la forma en que, para ser reutilizadas –y valoradas–, se funden determinadas joyas o piezas extraídas de equipos tecnológicos (computadoras, teléfonos inteligentes, tarjetas de computadora, semiconductores, etc.). Así, según la organización profesional World Gold Council, el 25,2% del oro en circulación en el mundo en 2023 fue reciclado, un aumento del 9% respecto al año anterior, y el resto provino de reservas nuevas, extraídas de la explotación. minas.
Un argumento de marketing ideal: el oro reciclado aún no suscita consenso. Aunque limita las emisiones de gases de efecto invernadero, sus detractores señalan que no reduce en modo alguno la cantidad de minería, que cada año sigue aumentando, y el precio del oro convierte al metal amarillo en un santo grial, en primer lugar como recurso financiero. Inversión, en forma de barra. Otros señalan que el oro se ha reutilizado desde el principio de los tiempos sin que esto se considere un criterio promocional…
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En Estados Unidos, determinadas asociaciones se han puesto en contacto con la Comisión Federal de Comercio para que se prohíba la expresión “oro reciclado”, considerada comercialmente engañosa. Se espera que la agencia resuelva este debate en los próximos meses. Otras marcas de joyería, como JEM Paris, prefieren utilizar el oro llamado “ético”, etiquetado por organizaciones especializadas como Fairmined o RJC. Estos garantizan que el metal provenga de minas artesanales y no industriales, que los mineros de oro sean tratados con dignidad y remunerados adecuadamente, y que no se libere cianuro ni mercurio al suelo durante la minería. En definitiva, si la segunda vida (oro reciclado) cuenta, los seguidores del oro ético argumentan esencialmente que parece más urgente mejorar las condiciones de la primera extracción.