Para la OTAN, Rusia está “reconstruyendo sus fuerzas más rápidamente de lo esperado”. “Está en camino de tener el ejército más grande del continente”. El destino de la guerra parece estar decidido.
Aún bloqueada en el Congreso estadounidense por los republicanos, la ayuda de 60 mil millones de dólares prometida por Joe Biden a Ucrania tiene consecuencias que podrían resultar decisivas sobre el terreno.
Una situación que preocupa en gran medida a los aliados. El Comandante Supremo Aliado en Europa (Saceur), el general estadounidense Christopher Cavoli, expresó su preocupación, en un comunicado de prensa del Departamento de Defensa estadounidense, por las “asociaciones estratégicas entrelazadas” entre Rusia, China, Irán y Corea del Norte que pretenden “desafiar el orden existente” y que son “profundamente contrarios a los intereses nacionales de Estados Unidos”.
Una situación que tiene como consecuencia directa que Rusia “está reconstituyendo sus fuerzas más rápidamente de lo que habíamos estimado”. Así, el ejército ruso ha perdido 2.000 tanques desde el inicio de la guerra en Ucrania y 315.000 hombres.
“Un ejército de 2 millones de hombres”
Sin embargo, los decretos que permiten nuevas movilizaciones de soldados han hecho que “Rusia haya aumentado, durante el año pasado, sus tropas de primera línea de 360.000 a 470.000 hombres” y el número de reclutas podría alcanzar los 2 millones en los próximos años.
“En los últimos meses, Rusia se ha reconstituido militarmente casi por completo”. “En resumen, Rusia está a punto de tener el ejército más grande del continente”, subrayó Christopher Cavoli. “Nos enfrentamos a tiempos difíciles, por decir lo menos, en el teatro europeo”, advirtió.
En Ucrania, en particular, el general Cavoli reclama la necesidad de liberar rápidamente una ayuda de 60 mil millones de dólares, ya que, según él, el ejército ruso es capaz de disparar cinco veces más proyectiles de artillería que los ucranianos. Si nada cambia, esta relación debería aumentar rápidamente de 1 a 10. “No estamos hablando de hipótesis”, insistió.
“Si un lado puede disparar y el otro no… el que no puede responder, pierde”.
“Si no seguimos apoyándolo, Ucrania se quedará sin proyectiles de artillería y misiles de defensa aérea en un tiempo relativamente corto”, subrayó el Comandante Supremo Aliado en Europa. “Si un lado puede disparar y el otro no puede responder, el lado que no puede responder pierde. Así que hay mucho en juego”.
A finales de marzo, Volodymyr Zelensky concedió una entrevista al Washington Post sobre la necesidad de liberar la ayuda. “Si no hay apoyo estadounidense, eso significa que no tenemos defensa aérea, ni misiles Patriot, ni bloqueadores para la guerra electrónica, ni proyectiles de artillería de 155 milímetros”. “Eso significa que vamos a dar un paso atrás, retroceder, paso a paso”.
