Al igual que Roger Federer, Rafael Nadal ya está retirado del tenis. Desde su derrota en la Copa Davis el 20 de noviembre, el español de 38 años ha dejado a un lado sus raquetas para empezar su segunda vida. Con una carrera que comenzó en 2001, el mallorquín sigue siendo un icono que va mucho más allá del tenis. Un estatus que, como Roger Federer, intentará mantener, e incluso crecer. Pero, ¿cómo funciona la transición a nivel de patrocinio cuando una leyenda así se retira?
Vinculado a Nike durante toda su carrera, pero también a Babolat, que le suministra raquetas desde los nueve años, Rafael Nadal también está afiliado a la marca de automóviles Kia e incluso a Louis Vuitton. Tantos patrocinadores que capitalizaron la imagen única del español. “Es Uno de los pocos atletas que tiene una personalidad de marca. Tiene un movimiento propio, el lazo. Ssus tics, sus resultados, su manera de golpear la pelota, su ‘espíritu de lucha’, la diadema, el logo… Todos estos elementos conforman su característica“detalla Lionel Maltese, profesor de la Universidad de Aix-Marseille y ex miembro del comité ejecutivo de la FFT.
“La memorización de Nadal es muy fuerte, como la de Ayrton Senna o Michael Jordan. Y la de Roger Federer o Serena Williams en el tenis”.
Lionel Maltese, especialista en marketing deportivoen franceinfo: deporte
Al retirarse, Rafael Nadal mantendrá sus asociaciones, que lógicamente se revisarán a la baja ya que están indexadas a su tiempo de exposición, es decir, a su presencia en la pista. “Los cinco sets, las finales de Grand Slam, los títulos, la búsqueda de lo que llamamos notoriedad espontánea, eso se reducirá porque ya no se producirá”explica Lionel Maltés.
Sin embargo, Rafael Nadal se beneficiará de lo que se llama efecto inercia, es decir, una imagen de marca que se mantiene incluso después de su retirada, consecuencia de su huella en el mundo deportivo. “La cantidad disminuirá en relación con la tasa de exposición, pero no me sorprendería que haya un efecto similar al de Roger Federer. Quizás menos, porque creo que la marca es un poco menos poderosa, pero el efecto de inercia es uno”. de los más importantes que existirán en el deporte”dice Lionel Maltés.
Sin embargo, con un impacto notable: las ventas de raquetas. “EL ‘Los nativos del tenis que lleguen no van a conocer a Nadal en la cancha, por lo que no se van a identificar con él. Aunque queden imágenes, los niños preferirán ir hacia la raqueta de Carlos Alcaraz, porque se identifican con alguien que está vivo, deportivamente hablando”.continúa. La marca francesa de raquetas lo ha entendido bien ya que tiene bajo contrato a un tal… Carlos Alcaraz por 10 años y al menos hasta 2030.
Al igual que Nike, que había preparado un clip especialmente para su retirada, Rafael Nadal está bien anclado en todos sus patrocinadores, que le han aportado más de 400 millones de dólares netos a lo largo de su carrera, según Forbes. Lógicamente verá evolucionar sus contratos, como ocurre con la marca francesa Babolat, su socia desde hace 29 años. “Llevábamos mucho tiempo anticipando esto con Rafa y su clan, explica Marion Cornu, directora de marketing de tenis de Babolat. Vamos a pasar a un contrato de embajador basado en tres pilares. El primero es el apoyo a los proyectos del jugador, a su fundación, a su academia para la cual ya lo apoyamos. El segundo es la participación del jugador en nuevas innovaciones y desarrollo de hardware. Y el tercero es la participación del jugador en los momentos más destacados de la marca.”
Si la marca Rafael Nadal es tan fuerte es porque su representante siempre ha sabido atraer socios potenciales. “Illinois es distintivo, y eso es lo que interesa a las marcas. Tiene un historial inmejorable, su historia se puede contar en una película, como la de Mohamed Ali. Y hay un respeto por parte de los compañeros que es extremadamente poderoso. El lado legendario realmente atrae a las marcas, al igual que la autenticidad”.continúa Lionel Maltés.
“Hay un enorme respeto por su humanismo. Nadal es tremendamente agresivo y no se rinde en el campo, pero en la vida es un cordero. Es limpio, respetuoso, educado. Eso agrada a las marcas, porque él no miente.”
Lionel Maltese, especialista en marketing deportivoen franciainfo; deporte
¿Hacia qué tipo de jubilado se dirigirá entonces Rafael Nadal? Probablemente no exactamente el de Roger Federer, que sigue siendo el deportista mejor pagado en términos extradeportivos con 95 millones de dólares anuales, gracias en particular a Rolex, pero también a la Copa Laver, integrada en el circuito ATP. “Federer Mucho antes de jubilarse se propuso ser empresario, con su propio evento, la Laver Cup, que hace resonar sus marcas. Es una exhibición que ha sido validada por el circuito ATP sólo por su nombre, es increíble”. señala el especialista.
Al igual que las canchas, los dos rivales y amigos han elegido un estilo muy diferente. “Federer es un inversor. Tiene la marca On, que está en un sector extremadamente competitivo, calzado y equipamiento deportivo. Nadal ha invertido en el deporte. Es el director de una academia. Las infraestructuras que creó no están sólo en Mallorca y él es La cara de Arabia Saudita ha invertido mucho en infraestructuras y academias en torno a su marca. personal. Así que eso se quedará”.continúa.
A diferencia del suizo, que se mudó a Uniqlo en 2018, cuatro años antes de su retiro, después de 18 años en Nike, Lionel Maltés ve a Rafael Nadal manteniendo sus asociaciones con sus patrocinadores de larga data. “Creo que es una persona leal y no lo veo haciendo nada, ni yendo a Adidas o algo así”.cree. Todo ello complementado con jugosas exhibiciones que ya comenzó a acometer al final de su carrera. “Hizo la exhibición para Netflix contra Carlos Alcaraz. El último también en Arabia Saudita (mediados de octubre), donde disputó sus últimos partidos oficiales reales”.señala.
Para evitar los escollos de Shaquille O’Neal y Andre Agassi, que se trasladaron a otro fabricante de equipos con poco éxito (Li-Ning para O’Neal, Adidas para Agassi), Rafael Nadal tendría todo el interés en no diversificarse demasiado, cree Lionel. maltés. “En general, esto falla cuando tienes personajes que se buscan a sí mismos y que al final tienen una imagen de marca que se pierde. A los que han quedado en su ADN, como Federer, Nadal, Senna, Zidane o Cruyff, les funciona”..