Una vez más, en la Ligue 1 los aficionados se enfrentan a prohibiciones de viajar, una práctica que lamentablemente se ha vuelto común en Francia.
El domingo por la tarde, durante la recepción del Olympique de Marsella ante el AS Saint-Étienne, los aficionados del Marsella no pudieron acceder al aparcamiento de visitantes de Chaudron, víctimas de una nueva decisión de la prefectura. Una medida que se inscribe en una tendencia generalizada: en lugar de gestionar los viajes y reforzar la seguridad, las autoridades suelen optar por prohibiciones globales, lo que deja los estadios menos animados.
El próximo gran choque entre Paris Saint-Germain y Olympique Lyonnais no será una excepción. La Prefectura de Altos del Sena y la Prefectura de Policía de París han anunciado la prohibición a los aficionados del Lyon de acudir este domingo al Parque de los Príncipes, ya sea para acceder al estadio o para circular por sus alrededores. Esta decisión incluye a cualquier persona que “reclame su condición de seguidor del equipo Olympique Lyonnais o se comporte como tal”. Duro golpe para la afición de Les Gones.
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