Mandanda y Sampaoli, el reencuentro
Steve Mandana y Jorge Sampaolique mantuvieron relaciones fluctuantes durante su paso juntos en el OM, se encuentran en el Stade Rennais con un desafío común: dar la vuelta al club, actualmente 13º en la Ligue 1 y en la lucha por permanecer en el Stade Rennais, ya conocía a Mandanda. , el único jugador de su plantilla con el que había trabajado en el pasado. Su colaboración en Marsella, sin embargo, dejó su huella. Bajo la dirección del técnico argentino, Mandanda había perdido su titularidad en favor de Pau López, reclutado por su juego de patadas y su capacidad para jugar alto. Mandanda tuvo que esperar los errores de sus rivales para recuperar su lugar al final de la temporada, contribuyendo a la clasificación para la Liga de Campeones y a la carrera europea del OM. En Rennes, Mandanda se encuentra en un punto de inflexión. A sus 39 años y en su último año de contrato, deberá convencer a Sampaoli de su utilidad en un contexto donde ningún jugador se considera imprescindible. El técnico argentino, sin entrenador de porteros designado, evaluará hacia enero las posiciones donde serán necesarios refuerzos, incluido el de portero. Mientras tanto, Mandanda sigue siendo el entrenador que el Rennes necesitará para salir de la crisis.
Amir Murillo: un futuro incierto con De Zerbi
Amir Murillorelegado a un segundo plano por Roberto De Zerbi en favor de Pol Lirola, no es titular desde el partido contra el PSG. Al regresar de la selección con Panamá, donde disputó dos partidos completos, Murillo está disponible para enfrentar al Lens y espera recuperar un lugar en el once titular. A pesar de actuaciones a veces convincentes, Murillo perdió la confianza de su entrenador. De Zerbi, descontento por su falta de valentía en la reanudación tras los partidos contra Brest, Toulouse y Reims, lucha por integrarlo plenamente en su sistema de juego. La incompatibilidad de Murillo con Mason Greenwood en el campo contrasta con la comprensión más natural que tiene. Lirola muestra. Calificado de ejemplar y trabajador por sus compañeros, Murillo parece sin embargo frenarse por un exceso de moderación, según una persona cercana al grupo: “Da la impresión de que este nuevo estatus (el de titular) le pesa un poco, le impide soltarse. Es casi demasiado amable. Es unánime en el grupo, es ejemplar, serio, trabajador… Ahora debe tomar conciencia de sus cualidades.“Con una adaptación complicada y un vestuario titular que parece pesar, Murillo podría ver su futuro escrito lejos del Marsella. Una salida en enero sigue siendo una opción, como ya se había considerado este verano para liberar una plaza para un jugador extracomunitario .