Aleksey Miranchuk anotó en el final para darle a Atlanta un empate 2-2 en la Major League Soccer contra el Inter Miami el miércoles, con Lionel Messi incapaz de conjurar ninguna magia como sustituto de último momento para los visitantes.
Messi, ocho veces ganador del Balón de Oro, había deslumbrado en su regreso tras una larga ausencia por lesión el sábado, anotando dos goles en el espacio de cuatro minutos en la victoria de Miami por 3-1 sobre Filadelfia.
Pero el entrenador Gerardo Martino dijo que tendría cuidado de no sobrecargar a su superestrella en una semana de tres partidos, y Messi quedó fuera de la alineación titular en Atlanta junto con sus ex compañeros de equipo del Barcelona Luis Suárez y Jordi Alba.
Miami se ha asegurado un lugar en los playoffs de la Conferencia Este de la Copa MLS y con 63 puntos lidera la carrera por el Supporters’ Shield, otorgado al equipo que encabeza la clasificación general.
El equipo de Florida ganaba 2-1 con goles de David Ruiz y Leonardo Campana cuando Messi entró al partido en el minuto 61.
La superestrella argentina estuvo cerca de marcar el gol de la victoria en el minuto 83, pero su remate en ángulo fue bloqueado por el portero de Atlanta, Brad Guzan, y el intento de Suárez de aprovechar el rebote también fue denegado.
Un minuto después, el ruso Miranchuk, fichado por el Atlanta procedente del Atalanta, ganador de la Europa League, a finales de julio, realizó un sensacional disparo con la zurda desde fuera del área.
El Inter se fue al descanso ganando 1-0 gracias al primer gol de la temporada de David Ruiz, de 20 años.
Ruiz, quien hizo su primera titularidad desde el 15 de junio en una alineación que incluía solo a tres de los titulares habituales de Miami, aprovechó un pase del argentino Franco Negri para rematar con un tiro bien colocado.
Atlanta empató en el minuto 56 gracias a Saba Lobzhanidze, cuyo cabezazo pegó en el defensor Ian Fray y se coló entre las piernas del portero Drake Callender.
Campana puso a Miami nuevamente en ventaja en el minuto 59, anotando de tiro libre para superar al argentino Gonzalo Higuaín como el máximo goleador de todos los tiempos del Inter Miami con su gol número 30.
La entrada de Messi pareció galvanizar a ambos equipos, así como a los embelesados espectadores en el Estadio Mercedes-Benz, donde los fanáticos se sintieron decepcionados cuando la superestrella argentina se perdió un partido el año pasado.
Pero fue Atlanta el que finalmente aprovechó el impulso energético.
Mientras Messi, Alba y Suárez entraron como suplentes en la segunda mitad, Miami no pudo contar con los suspendidos Sergio Busquets y Tomás Avilés, así como con los lesionados David Martínez y Diego Gómez.
‘UN JUEGO DIFÍCIL’
Martino observó el partido desde una suite mientras cumplía una suspensión por acumulación de tarjetas amarillas.
“Fue un partido difícil, especialmente porque vinimos a jugar aquí, es un estadio difícil para jugar y un equipo difícil”, dijo el entrenador asistente de Miami, Javier Morales. “Pero creo que tuvimos una buena actuación.
“Creo que en el primer tiempo encontramos el gol y manejamos bien el partido. Y luego en el segundo tiempo, cuando ellos marcaron el gol, Campana respondió con el nuestro y entonces pensamos que íbamos a manejar un poco mejor el partido”.
“Pero, por supuesto, Atlanta juega en casa, van a presionar, tuvieron una gran multitud y este es el tipo de juego que esperábamos”.
Aunque solo obtuvieron un punto del encuentro, Miami aún puede asegurar el Supporters’ Shield con nueve puntos en los cinco partidos restantes de la temporada regular.
En la Conferencia Este, tenían una ventaja de ocho puntos sobre Cincinnati, que tuvo goles de Yuya Kubo y Luca Orellano en una victoria de 2-1 sobre Minnesota.
