En Etiopía, la malaria ha cruzado un umbral crítico con más de 7,3 millones de casos este año, lo que ha obligado a Médicos Sin Fronteras (MSF) a movilizar sus equipos en un contexto sanitario y humanitario particularmente degradado.
Médicos Sin Fronteras (MSF) expresa su profunda preocupación por la crítica situación sanitaria en Etiopía, donde la malaria está alcanzando niveles epidémicos con más de 7,3 millones de casos registrados este año.
En dos regiones particularmente afectadas, Oromia y Gambella, la organización humanitaria interviene junto con el Ministerio de Salud de Etiopía para abordar esta crisis. En comparación con los 4,1 millones de casos de 2023, el salto epidemiológico es significativo y convierte a Etiopía en uno de los países más afectados de África Oriental.
La situación es especialmente crítica en la región de Oromía, que concentra el 48,5% de los casos nacionales. El número de pacientes se quintuplicó entre agosto de 2023 y agosto de 2024, lo que revela un rápido deterioro de la situación sanitaria.
Los desafíos son múltiples: un sistema de salud ya debilitado por conflictos recientes, una población vulnerable por la inseguridad y el acceso limitado a la atención, y la presencia de numerosos refugiados. Sólo en el campo de refugiados de Kule, que alberga a más de 50.000 personas, los casos de malaria aumentaron un 150% en 2024.
MSF desplegó rápidamente una respuesta de emergencia, especialmente en los hospitales de Nekemte y Nejo, donde sus equipos tratan a unas 750 personas cada semana. Los equipos médicos trabajan día y noche para brindar atención e implementar medidas preventivas, incluida la vacunación de los niños.
“El sistema de salud ha llegado a sus límites”, subraya Jocelyn Yapi, jefa de misión de MSF, ilustrando la urgencia de la situación. George Mapiye, coordinador médico adjunto, confirma que el número de contagios es el mayor en cinco años.
Esta crisis sanitaria pone de relieve la fragilidad de los sistemas de salud en regiones que enfrentan múltiples desafíos humanitarios simultáneamente y subraya la importancia crucial del apoyo internacional en la gestión de epidemias.
MG/as/fss/ac/APA
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