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En Auch, deporte adaptado a todas las edades contra las enfermedades respiratorias

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Lo esencial
En Auch, la asociación regional Occitan’air apoya a los pacientes que padecen enfermedades respiratorias con sesiones semanales de deporte adaptado. Un programa que tiene como objetivo reforzar sus capacidades físicas, mentales y sociales. Explicaciones.

En el barrio de Garros, varias personas se reúnen una vez a la semana para una sesión deportiva. ¿Qué tienen en común? Todos padecen enfermedades respiratorias como: enfermedad pulmonar obstructiva crónica, asma, enfisema, fibrosis, hiperventilación, covid prolongado, cáncer de pulmón, etc.

Por iniciativa de la asociación Occitan’air desde hace varios años apoya a los pacientes en torno a un plan de “rehabilitación respiratoria”.

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En Auch, ofrece una gama de cuidados personalizados, proporcionados por profesionales de la salud, destinados a fortalecer las capacidades físicas, mentales y sociales de los pacientes. Todo esto está supervisado por profesionales de la actividad física capacitados, llamados “profesores de actividad física adaptada” (EAPA). Implantada en toda la región, la asociación se instaló en Auch hace unos años.

«Se trata de personas que padecen una patología y que, a pesar de los tratamientos neumológicos, se quedan sin aliento. Detrás de esto hay una falta de actividad que provoca una atrofia muscular. Cuanto más atrofiados están los músculos, más dificultades tienen las personas para realizar las actividades cotidianas», afirma Fabrice Semerle, representante de la asociación.

Esta situación puede llevarnos muchas veces al aislamiento y al sedentarismo. “Entramos en lo que se llama un círculo vicioso de desacondicionamiento”.

Aquí es donde entra en juego Occitan’air. Creada en 2003 por el neumólogo Daniel Bajon y Yann Darolles y con sede en Auch desde 2017, la asociación acompaña a las personas que lo desean ofreciéndoles un programa de rehabilitación respiratoria a domicilio de tres meses de duración.

Falta de neumólogos en el Gers

Durante dos horas semanales, un profesor de actividad física adaptada (EAPA) propone varias actividades (resistencia, fortalecimiento muscular, motricidad, etc.), “todo ello con el objetivo de mantener la capacidad física y seguir realizando las actividades cotidianas”. Por supuesto, estas sesiones no son suficientes por sí solas, y se anima a los pacientes a caminar con regularidad, al tiempo que reciben recomendaciones adaptadas.

“En el Gers hay una gran escasez de neumólogos y los pacientes desconocen la existencia de estos programas. La única solución para ellos son los tratamientos farmacológicos, mientras que la actividad física regular puede mejorar su capacidad respiratoria y proporcionarles consejos sobre el manejo de la respiración”, asegura Fabrice Semerle.

Más allá de las actividades, la asociación ofrece un verdadero apoyo con evaluaciones y seguimiento, pero también jornadas de educación terapéutica que permiten a los pacientes comprender mejor su patología. Así, pueden encontrarse con cuidadores, fisioterapeutas, neumólogos, psicólogos o incluso nutricionistas.

Deporte adaptado en grupo

Una vez a la semana, también pueden participar en un programa de grupo con talleres de educación terapéutica. Este programa se organiza de septiembre a julio de cada año, siempre supervisado por una EAPA. En Gers, en Auch, Élise forma parte de él. Fumadora desde hace casi cuarenta años y con unos sesenta años, descubrió la asociación en 2017 por el boca a boca.

“En aquella época, si no fumabas, no estabas de moda. Empecé en el instituto, tenía 20 años”, confiesa la gersoise. Hoy, tiene algunas dificultades respiratorias, así que decidió unirse a Occitan’air y tomar las riendas. “Cuando quiero correr, es complicado. Pero hay días que son más duros que otros”. Dos horas a la semana, los jueves por la tarde, son la oportunidad perfecta para salir y reunirse con amigos.

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“Hacemos sentadillas, sprints, ejercicios de equilibrio, juegos de memoria, paseamos cuando hace buen tiempo. También nos hacen pruebas de saturación con regularidad”, explica esta mujer de sesenta años. Desde que se unió a la asociación, gracias a su perseverancia y a su determinación inquebrantable, afirma: “Sí, hoy las cosas están mucho mejor”. Como ella, Jean-Louis testifica: “Desde que se creó esta actividad, he notado una mejora en mi control respiratorio”.

El deporte previene enfermedades crónicas y, más que nunca, contribuye al tratamiento de un gran número de patologías de larga duración. “No es que por tener una enfermedad respiratoria no se pueda hacer nada”, concluye Fabrice Semerle.

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