Una noche bajo las estrellas… y una avalancha sorpresa
Hace unas semanas, Li tenía un plan simple: fotografiar los rastros de estrellas sobre el monte Xiannairi. Pero la naturaleza decidió otra cosa. Un enorme bloque de hielo, llamado serac, se desprendió del glaciar colgante y provocó una espectacular avalancha.
Hasta el momento, nada extraordinario. Pero al mirar sus fotografías, Li descubrió un detalle extraño: destellos de luz azul seguían el descenso de la nieve y el hielo. Y sobre todo, lo más sorprendente es que eran invisibles a simple vista.
Triboluminiscencia: una luz nacida del shock
Para explicar este fenómeno hablamos de triboluminiscencia. Es una palabra complicada para describir una luz que aparece cuando un material se rompe, roza o sufre un impacto.
En el caso de la avalancha, el rayo azul estaría relacionado con puntos de choque
donde el hielo se rompe contra la montaña. Estas colisiones podrían generar cargas eléctricas, que ionizan el aire alrededor y producen esta luz azul. Una especie de mini éclair, pero en versión glaciar.
Una rareza intrigante
Esta no es la primera vez que se observan destellos azules en este tipo de situaciones. Unas semanas antes que Li, otra avalancha en el monte Muztagh Ata en Xinjiang mostró un fenómeno similar. Pero estos eventos son raros, incluso si las avalanchas son comunes.
Según los estudios, el hielo contiene campos eléctricos naturales, creados por iones atrapados en su estructura. Cuando se agrieta repentinamente, estos campos se liberan y pueden producir luz. Este fenómeno, muy conocido en el laboratorio, es difícil de observar a gran escala.
Un golpe de suerte
Si Li logró realizar tal disparo, es principalmente gracias a una agradable coincidencia científica. El rayo azul sigue siendo un misterio, pero podría ayudarnos a comprender mejor las fuerzas que actúan en el hielo. Dicho esto, si te encuentras con uno, es posible que estés cerca de una avalancha, así que ten cuidado de todos modos.