Emmanuel Stamatakis, profesor involucrado en la investigación, destaca que lo importante no es necesariamente realizar una rutina deportiva intensa sino practicar breves períodos de actividad intensa. Los esfuerzos de un minuto ya pueden tener importantes beneficios para la salud del corazón: “Descubrimos que un mínimo de 1,5 minutos a un promedio de 4 minutos de actividad física vigorosa diaria, realizada en ráfagas cortas de hasta 1 minuto de duración, se asociaba con mejores resultados de salud cardiovascular en mujeres de mediana edad que no participaban en ejercicios supervisados. ejercicio fisico“.
Aquí le mostramos cómo mejorar su microbiota intestinal y su bienestar.
Pequeños hábitos para integrar en tu vida diaria
En concreto, para practicar estos pocos minutos de actividad física y como sugiere el estudio, se puede, por ejemplo, subir escaleras (en lugar de tomar el ascensor), jugar a la mancha con un niño o incluso llevar la compra. Todos estos pequeños momentos cotidianos son acciones que sólo pueden resultar beneficiosas, especialmente para las personas que no practican deporte. Estas sugerencias deconstruyen la idea de que sólo los ejercicios estructurados en el gimnasio pueden mantener una buena salud cardíaca.
Esto significa que un estilo de vida saludable se basa no sólo en una dieta saludable y un sueño de calidad, sino también en estos interludios físicos que agotan el cuerpo. Si logras integrar la idea de que este pequeño período de actividad física regular es simplemente parte de tu vida diaria y que no es restrictivo, ¡lo habrás ganado todo!
Este simple hábito diario podría ahorrarte once años de esperanza de vida